Hace 100 años el Planalto Central brasileño no era más que un desierto. La capital más joven de Latinoamérica cumplirá solo 60 años.
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No fue hasta 1960 que, en medio de la nada, emergió la actual capital de Brasil: Brasilia.
Exactamente, desde el 21 de abril de 1960 sustituyó a Río de Janeiro como capital de Brasil. Fue construida de la nada a partir de un «sueño» del entonces presidente Juscelino Kubitschek.
La capital más joven de Latinoamérica cumplirá solo 60 años
El sueño de construir la ciudad ya existía desde el siglo XIX. El patriarca de la independencia brasileño, José Bonifacio, ya ideaba una ciudad con ese nombre para reemplazar a Rio de Janeiro como capital.
Las obras comenzaron en 1956 y el 21 de abril de 1960 fueron instalados en Brasilia los tres poderes de la República. En aquel entonces, tenía 64.000 habitantes.
Hoy en día tiene en torno a tres millones de habitantes. Es la cuarta más poblada del país detrás de Sao Paulo, Río de Janeiro y Salvador de Bahía.
Se diferencia de la mayoría de las capitales del mundo por su concepción futurista. Es por eso que en algunas cosas parece ajena al propio Brasil.
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Sin embargo, los nacidos allí no cambian por nada la calma de la ciudad. Con solo 60 años de vida, la calidad de vida más alta, los más bajos índices de inseguridad y la mayor renta por cápita de Brasil.
EFE
