Los bogotanos realizaron este miércoles un cacerolazo desde sus casas en rechazo a que el presidente Iván Duque tomara el control del orden público ante la emergencia por el COVID-19, lo que dejó en suspenso un simulacro de aislamiento obligatorio en la ciudad que había programado la Alcaldía.
El cacerolazo, que no tuvo tanta acogida como los realizados en noviembre y diciembre del año pasado contra la política económica y social de Duque, se replicó en diferentes barrios de la ciudad como Chapinero, Pablo VI y Cedritos, en donde los ciudadanos manifestaron con cucharas y ollas en mano su inconformidad por las medidas gubernamentales.