Aunque el agente había logrado un preacuerdo con la Fiscalía por la muerte de Nicolás Neira, la Corte Suprema lo tumbó.
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El Esmad se encuentra en medio de críticas cada vez más intensas, incluso pidiendo su desmonte. El motivo es los actos de agresión a manifestantes pacíficos en los primeros días del paro nacional. Estos actos llegaron al punto de provocar la muerte de Dilan Cruz, uno de los manifestantes este sábado en el centro de Bogotá, quien recibió el impacto de una bala y luchó dos días por su vida de manera infructuosa.
Pero el Esmad también ha afrontado varias denuncias por este tipo de casos. Una de estas se produjo por la muerte de Nicolás Neira, el 1 de mayo de 2005. En esta oportunidad, el agente Néstor Julio Rodríguez habría disparado una bala de gas lacrimógeno contra los jóvenes que se manifestaban por el Día del Trabajo.
La bala golpeó a Neira, de 16 años, quien falleció pocas horas después por la gravedad de sus heridas. Medicina Legal confirmó las causas de la muerte del joven, lo que inició una acción judicial.
El disparo, según la Fiscalía, no habría sido autorizado por los superiores de Rodríguez. Así mismo, fue efectuado directamente a los manifestantes, no de forma parabólica.
Rodríguez había conseguido un preacuerdo con la Fiscalía en el caso, pero la Corte Suprema de Justicia lo tumbó. El motivo es que estos preacuerdos no se pueden firmar cuando la víctima es menor de edad.
Este martes, en medio del paro nacional, Rodríguez deberá afrontar la audiencia preparatoria del juicio en su contra. El juicio por la muerte de Nicolás Neira se llevará a cabo en la tarde de este martes en el complejo judicial de Paloquemao.
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