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Terapia psicodélica ayudará a personas con estrés postraumático

Estudio pionero. Conocido como éxtasis, MDMA se probará la terapia psicodélica en Brasil para el tratamiento del trastorno de estrés postraumático

La sustancia psicodélica conocida como éxtasis puede convertirse en remedio pronto. El MDMA (sigla de metilenodioximetanfetamina) está cerca de la legalización en Estados Unidos. En Brasil, los expertos también están poniendo sus ojos en la sustancia, que se utilizará para el tratamiento de TEPT (trastorno de estrés postraumático).

Investigadores brasileños están seleccionando pacientes para el primer estudio clínico de América Latina, previsto para iniciar este mes (marzo, 2018). La principal justificación para la investigación del uso terapéutico del MDMA para TEPT son las dificultades en el tratamiento del trastorno, explica el neurocientífico Eduardo Schemberg, uno de los expertos al frente del estudio pionero.

«Actualmente no hay ningún remedio disponible, los psiquiatras recetan antidepresivos, drogas para dormir e incluso antipsicóticos, pero sólo para controlar síntomas, como ataques de pánico, dificultad para dormir, cambios de humor, nada para tratar el problema de hecho».

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La principal característica del trastorno, según el neurocientífico, es la incidencia de una memoria aversiva muy intensa. Es decir, el trauma. «Es un recuerdo tan doloroso y aterrorizante que la persona no puede hablar sobre el problema en el consultorio y no puede resignificar lo ocurrido, sienten culpa, vergüenza y se esconden detrás de una especie de capullo psicológico para intentar seguir con la vida, pero lo que se produjo continúa allí, doliendo y provocando en general, muchas dificultades afectivas y emocionales que impactan relaciones personales y de trabajo «.

Efectos

El tratamiento probado en Brasil será la psicoterapia asistida con MDMA, similar a la investigación norteamericana. El efecto de la sustancia facilita a los pacientes encarar lo ocurrido, observa Schemberg. Según él, estudios de neuroimagen muestran que el MDMA disminuye la actividad de la amígdala, región cerebral relacionada con las sensaciones de miedo y estimula la corteza prefrontal, más ligada al raciocinio e intelecto.

La reacción observada en los estudios realizados en los Estados Unidos es de una inmersión profunda en los sentimientos del trauma, sensaciones de dolor y miedo, son comunes, así como el llanto. Por eso, la experiencia sólo debe realizarse con la supervisión de terapeutas especializados en este tipo de tratamiento.

«La tendencia es que esos efectos asustan, parece que la persona está sufriendo», argumenta el neurocientífico. Pero, él explica que el tratamiento funciona de esa manera, permitiendo que la persona logre romper bloqueos emocionales y lidiar con sus sentimientos.

Apoyo extranjero

La investigación brasileña tiene el apoyo de la ONG estadounidense Maps (Multidisciplinary Association for Psychedelic Studies), que desde hace más de tres décadas investiga el potencial terapéutico de sustancias psicodélicas y reivindica la legalización de usos en psicoterapia. «Investigadores internacionales se están preparando para pruebas finales y la aprobación por los órganos FDA (Food and Drug Administration) y EMA (European Medicinas Agency) deber suceder hasta 2021», dice Bryce Montgomery, director de comunicación de Maps. El estudio también se está realizando en Canadá, Suiza e Israel.

Evento reunió a investigadores en México

El potencial terapéutico de sustancias psicodélicas estuvo en el centro de la conferencia Plantas Sagradas en las Américas, realizada el mes pasado en Ajijic, a orillas del lago Chapala, en México. Más de 140 ponentes de dos docenas de países compartieron avances recientes de investigaciones, estudios y experiencias.

Médicos, químicos, biólogos, neurocientistas, psicoterapeutas, antropólogos, etnofarmacólogos, abogados, cineastas y una variedad de otros profesionales dieron un amplio panorama sobre el tema.

«Después de un hiato de casi cuatro décadas en investigaciones, hallazgos recientes sobre resultados clínicos favorables con algunas de esas sustancias (LSD, psilocibina, cetamina y ayahuasca, por ejemplo) reavivó el interés científico, dijo el investigador mexicano Rodrigo Pérez Esparza, uno de los ponentes de la conferencia.

La terapia con MDMA para TEPT fue abordada en el evento. «Cerca del 35% de pacientes crónicos, que no responden a los métodos convencionales, necesitan nuevos tratamientos», defendió la psicóloga colombiana Marcela Otalora.

 

Carlos Minuano, MWN

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