Noticias

¿Por qué hay cada vez más tiroteos en Estados Unidos?

Casi un tercio de los tiroteos masivos en el mundo ocurridos entre 1966 y 2012 han sido en Estados Unidos, según estudio. Metro investiga por qué está pasando y cómo resolver el problema.

El último tiroteo en acaparar la atención de la prensa fue el ocurrido el 14 de febrero en una escuela de Florida. Ese día fallecieron 17 estudiantes y profesores, y otras 15 personas resultaron heridas, por los disparos hechos por un loco armado con un fusil AR-15, de US$500.

Pero ese tiroteo no fue el último ocurrido en Estados Unidos durante 2018. Según el sitio GunViolenceArchive.Org, que desde el 2013 monitorea y registra todo tipo de incidentes con armas de fuego en el país, el último tiroteo considerado “masivo” ocurrió el domingo 4 de marzo en Rockford, Illinois. Una persona murió, y otras cuatro resultaron heridas.

El sitio registra tiroteos clasificados como “masivos” casi todos los días. Además, lleva la cuenta de todos los incidentes con armas de fuego en el país. Al miércoles 7 de marzo, 2.577 personas habían muerto en lo que va del año, en 9.733 incidentes registrados. Los menores de 18 años fallecidos eran 593.

Recomendados

El último tiroteo en una escuela ocurrió el miércoles 7 de marzo en la Huffman High School de la ciudad de Birmingham, en el estado de Alabama. Una chica de 17 años perdió la vida.

Los estadounidenses, menos del 5 por ciento de la población mundial, poseen casi la mitad de las armas de propiedad civil del mundo. El riesgo de morir por un balazo es 300 veces mayor para un estadounidense que para un japonés. De acuerdo a un estudio hecho por la Universidad de Alabama en 2017, casi un tercio de los tiroteos masivos en el mundo entre 1966 y 2012 se produjeron en EEUU (90).

Y la tendencia es al alza: si en 2014, según GunViolenceArchive.Org, hubo 51.864 incidentes con armas de fuego, en 2017 fueron 61.549. En 2014, 12.556 personas murieron en incidentes con armas de fuego. En 2017, fueron 15.597.

“Estados Unidos está experimentando una crisis de violencia por armas de fuego”, dice Hannah Shearer, una experta en Segunda Enmienda y en leyes de control de armas que trabaja como analista de casos para el Giffords Law Center de EEUU.

Solución: ¿Más control legal?

Unas de las deudas de los gobiernos de Barack Obama fue no poder hacer más estrictas las leyes que regulan el acceso a las armas. El la influencia de la Asociación Nacional del Rifle (NRA) en los congresistas republicanos, quienes controlan el Congreso desde 2010, es tal que todos sus proyectos resultaron bloqueados.

La NRA financió la campaña de Trump. Fueron US$30 millones los que aportaron para que resultara electo presidente. Pero el tiroteo de febrero en Florida gatilló un cambio no solo en algunas de las instituciones privadas involucradas con la venta de armas, sino que también en el propio presidente.

Todo, en un país donde las armas forman parte del mito fundacional por la expansión hacia el Oeste. Y donde la figura de John Wayne representa el ídolo americano.

Trump comenzó a apoyar iniciativas que hacen más estricto el acceso, como el chequeo y la actualización obligada de antecedentes. La iniciativa cuenta con más del 90 por ciento de apoyo popular en el país, según encuestas.

“A nivel estatal en EEUU, hay una clara correlación entre las leyes fuertes y menores cifras de violencia con armas de fuego”, explica Shearer. Para la analista, la evidencia demuestra que es la falta de control legal lo que está provocando que los tiroteos aumenten. Y esta es la única forma de reducir un problema que hasta el momento no ha hecho más que agravarse.

 

«La realidad es que la violencia se puede prevenir»

Hannah Shearer, abogada especialista en Segunda Enmienda y leyes de control de armas en Estados Unidos, analista del Griffords Law Center.

P: ¿Cuánto tienen que ver las leyes del acceso a las armas con los últimos tiroteos en Estados Unidos?

– Los estadounidenses tienen 25 veces más probabilidades de ser asesinados por un arma que las personas en otras naciones desarrolladas. Es aparente que las leyes de armas débiles de Estados Unidos han contribuido a tasas más altas de violencia porque otros países no experimentan el mismo número de masacres de armas a gran escala.

P: Entonces, si las leyes fueran más duras, ¿se podrían prevenir estos casos?

– Las personas no deberían por qué tener miedo a que les disparen y las maten cuando van a la iglesia, cuando van a estudiar o mientras asisten a un festival de música. El ejemplo de otros países, donde las personas no viven con este mismo tipo de miedo, muestra que las leyes más estrictas pueden evitar tanto las masacres con armas de fuego como los disparos cotidianos. Es hora de que los congresistas del país intensifiquen y respalden las soluciones basadas en la evidencia, como las verificaciones universales de antecedentes, en lugar de tratar las masacres con armas de fuego como algo inevitable.

P: ¿Cómo se relacionan los problemas mentales con estos ataques?

– En Estados Unidos hay tasas similares de enfermedades mentales que en otros países desarrollados. Sin embargo, experimentamos muchos más ataques con armas de fuego. No es una respuesta decir que simplemente necesitamos tratar la enfermedad mental, porque eso solo trata parte del problema. También necesitamos mejorar nuestras leyes de armas para asegurarnos de que las personas que se encuentran en una crisis de salud mental no puedan armar arsenales de armas letales tan rápida y fácilmente.

P: ¿Por qué, a pesar de tantos ataques, las leyes no han cambiado en Estados Unidos?

– El país no ha mejorado sus leyes federales de armas de fuego porque el lobby de las armas corporativas ha tratado de hacer de la seguridad de las armas un tema prohibido para los legisladores. El lobby de las armas de fuego quiere perpetuar una narrativa de que la violencia con armas de fuego es normal y no se puede prevenir. Pero la realidad es que la violencia se puede prevenir. Más del 90 por ciento de los estadounidenses respaldan políticas preventivas simples, como las verificaciones universales de antecedentes. Con suerte, los legisladores estadounidenses encontrarán el coraje para enfrentarse al cabildeo de las armas de fuego y promulgar las leyes que la mayoría de los estadounidenses exigen.

Tags

Lo Último

Lo que debe saber


Te recomendamos