Se ha generado una controversia en Cartagena a raíz de la petición de una ciudadana australiana quien desea ser guía en recorridos por la ciudad, pero que fue detenida por la Policía de Turismo de Cartagena porque no contaba con los permisos.
PUBLICIDAD
La mujer, identificada como Kristy Ellis, publicó en un video de Facebook su denuncia y momento en que fue detenida por las autoridades.
«Estas señoras, mis clientes, están sentadas en el andén frente a la estación de policía de CAI. ¿Su crimen? Intentar aprender sobre champeta, gentrificación en Getsemani, dónde comprar el mejor boli de corozo, etc. Así es como recordarán la ciudad y las personas que amo.
Cartagena; Estoy cerca de darme por vencida. Su policía de turismo me impidió hablar de historia en los tours porque no tengo una tarjeta oficial de guía (y se ha demostrado que es imposible que me califique). Entonces me detuve», escribió la mujer en su cuenta de Facebook en una larga carta donde muestra su inconformidad.
Este domingo el diario El Universal hizo eco a la historia de esta extranjera. «Usualmente la detenían, le pedían su carné de guía y ella les mostraba su Registro Nacional de Turismo y los papeles en regla de la agencia que ella misma montó, Cartagena Connections, y la dejaban seguir. Pero esta vez la Policía le dijo que cada vez que la vieran hablando “con gente en público” iban a detenerla y a hacer exactamente el mismo proceso. Algo cambió con el nuevo Código de Policía».
“Entiendo a la Policía… pero es muy duro, ¿realmente de tantas cosas que están pasando en esta ciudad eso es lo más importante ahora? ¿Parar esos clientes que están haciendo cosas buenas para la ciudad, que quieren tener una vista de Cartagena diferente, alternativa?”, escribió Ellis.
También asegura que se aspecto de extranjera no la ayudado a obtener los permisos. «porque soy mona, es muy fácil identificarme, como ‘ah, ahí va la gringa australiana’” y no ha obtenido los permisos porque ha sido “imposible, porque no soy colombiana”.
Su video lleva cerca de 10 mil reproducciones en Facebook y cientos de mensajes de seguidores que le piden que no se rinda, sin embargo pese a su queja, la extranjera no ha recibido todavía respuesta de las oficinas de turismo de Cartagena sobre su caso.