Los registros fueron capturados en la tercera comisaría de Santiago Centro, en Chile, en donde una de las uniformadas decidió grabar no solo este momento, sino también otro en el que deja sin almuerzo a los funcionarios.
Durante uno de los pasajes de las grabaciones, la responsable de la decisión se justifica indicando que en el reglamento es claro que se debe trabajar de 08:00 a 18:00 horas y que «no les puede estar solucionando el problema de con quien dejar a su hijo. Ese es un problema personal».