El presidente de un grupo ultraconservador estadounidense Family Research Council, Tony Perkins, el cual causó polémica un tiempo atrás tras asegurar que los desastres naturales son un castigo de Dios a la humanidad por aceptar a los homosexuales.
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Sin embargo, quien resultó ser víctima de un desastre natural fue él mismo, ya que su vivienda quedó inutilizada tras las inundaciones que afectaron a Louisiana.
El hecho hizo recordar sus anteriores palabras. Ante esto, negó que lo sucedido fuese un castigo divino, afirmando que lo que aconteció es “un increíble y alentador ejercicio espiritual con el que alcanzar el siguiente nivel en el camino hacia dios todopoderoso que siempre hace las cosas bien”.
Perkins deberá pasar cerca de seis meses en otro domicilio a la espera de los trabajos para reparar los daños en su hogar.