Imposible contener todo el agua, que llegaba a las ciudades e inundaba los edificios como este centro comercial cuyos pasillos se convertían en auténticas riadas.
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Más de 110.000 personas del país han tenido que abandonar sus hogares antes de que el agua lo cubriese todo o que, como esta casa acabase derrumbada.
La maquinaria pesada se ha convertido en el único medio de transporte seguro.Porque andar por algunas calles es ya casi imposible. Lo mismo que circular por las carreteras, donde numerosos puentes han desaparecido.
El Niño, el calentamiento del agua del Pacífico que provoca lluvias torrenciales, ya se ha cobrado la vida de, al menos, 90 personas. Y el cielo advierte con otro fenómeno, un arco iris de fuego, que el peligro continúa. Video: Reuters.
