Ismael Arciniegas, quien estaba en una cárcel en China y fue ejecutado por el delito de narcotráfico, no estaba en las mejores condiciones. Según reveló su hijo, Arciniegas estaba feliz antes de su muerte porque «no iba a sufrir más las malas condiciones de la cárcel».
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La cárcel en China suele ser más dura de lo normal. Según Juan José Herrera, hijo de Ismael Arciniegas, las condiciones en las que estaba su padre eran terribles. Los primero que limitó las comunicaciones de su padre fue el idioma. «El idioma aleja mucho a las personas. No hay comunicación».
Escuche acá el audio completo de la desgarradora llamada de Arciniegas con su familia.
Sin embargo, ese era el menor de los males. Según Herrera, su padre estaba «amarrado a la pata de una cama con 16 eslabones», lo que no le permitía la movilidad necesaria.
Además, Arciniegas solo tenía una hora de sol a la semana y, el resto de tiempo, se la pasaba en la habitación sin poder ver, oír o leer nada.
La situación era tal que el hermano de Arciniegas, Luis, quien también fue capturado en China por tráfico de drogas, prefirió morir a seguir a esas condiciones: “El hermano de mi padre se dejó morir porque dejó de comer. Le dio una diabetes y terminó muriendo en la cárcel en China”, afirmó Juan José Herrera.