Desde las 11:00 a.m. del miércoles, 8 de febrero de 2017, las autoridades recibieron la primera llamada que alertaba sobre las llamas que empezaban a consumir el cerro.
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Durante horas el cuerpo de Bomberos de Bello intentó controlar el incendio con 3 máquinas y más de 22 personas en el terreno, pero los fuertes vientos y el sol no permitieron el éxito de la maniobra.
César Augusto Arango Serna, director de la oficina asesora de la gestión del riesgo de Bello dijo que, “el incendio empezó a las 11 de la mañana del día miércoles, unidades de los Bomberos de Bello se desplazaron a atenderlo, se contó con el apoyo de la defensa civil y de Bomberos de Copacabana, pero no se pudo controlar”.
El funcionario informó que en las horas de la tarde del mismo día le comunicaron la situación al DAPARD y presentaron una solicitud formal a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo para recibir apoyo de la Fuerza Aérea para utilizar un helicóptero y mitigar las llamas desde el aire.
“En total más de 120 personas intervinieron en el terreno, entre ellos bomberos de Bello, Copacabana, Sabaneta e Itagüí; así como 20 personas de Defensa Civil y 30 unidades del Ejército de Colombia”, informó Arango.
Las causas del Incendio
Sobre las causas que iniciaron las llamas en el Cerro, Arango fue enfático al decir que fue provocado por manos criminales.
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“La causa, casi que absolutamente cierta es que fue por manos criminales, manos responsables. Eso naturalmente habrá que esperar a que las personas nos confirmen, porque la gente de la comunidad nos hablaba de unos muchachos que estaban ahí en el sector donde inició la conflagración”, afirmó el director.
Respecto a la incidencia de este tipo de situaciones cuando se registran incendios forestales, el funcionario resaltó que, “en Colombia en el 95% de los incendios forestales hay mano criminal”.
El cerro en otras oportunidades se había incendiado, sin embargo es la primera vez que se registra con esta magnitud.
“El Cerro es blanco de personas responsables, de estos enfermos, que le prenden fuego casi que anualmente por esta época”, agregó Arango.
Las principales dificultades con las que se enfrentan las unidades que atienden los incendios son los vientos, el sol y la extrema sequedad, además de las características del terreno.
Con este incendio se han afectado 80 hectáreas, es decir, el equivalente al 40% del Cerro, informó el funcionario.