Ocho miembros de una misma familia, incluido un menor de edad, han aparecido muertos en sus casas en el condado de Pike, en Ohio, en Estados Unidos. El autor o los autores del crimen están en paradero desconocido, posiblemente armados. Todas las víctimas pertenecen a la familia Rhoden. El modus operandi ha puesto en alerta a los investigadores. Todos los cuerpos han aparecido con un tiro en la cabeza. El fiscal general del estado, Mike DeWine, cree además que los asesinatos han tenido lugar durante la noche, mientras la familia dormía. Se descarta que los fallecidos cometieran suicidio y no se ha arrestado a ninguna persona. Los únicos supervivientes del tiroteo han sido tres niños. Un bebé de apenas una semana, otro de seis meses y el mayor de tres años de edad. Video/ Reuters
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