A defender el espectro para todos

Desde estas páginas y desde Twitter, los ciudadanos hemos defendido las zonas protegidas del Parque Nacional Tayrona frente a la amenaza de ser invadidas por intereses de construir megahoteles de alto impacto en territorios sagrados para los indígenas de la región. Y algo logramos. También nos opusimos a que el páramo de Santurbán cediera a la depredación de la minería a gran escala; protestamos por los peligros de la Reforma a la Justicia y evitamos que la elección de Secretario del Senado cayera nuevamente en manos de alguien como Emilio Otero. Los ciudadanos hemos superado los mitos de la falta de participación y se han convertido en la conquista de hitos.

Pero se avecina una nueva amenaza y no parece haber muchas ganas de contrarrestarla; más que por voluntad, por desconocimiento. El espectro radioeléctrico hace parte de los recursos naturales de la nación y, como tal, debería tener toda nuestra atención. En el segundo semestre de este año, en una fecha que no está del todo clara, se asignarán otros 225MHz adicionales a los 215 que ya tienen los operadores comerciales en Colombia, mediante la denominada ‘Subasta 4G’. Hay temor porque crezcan los oligopolios que ya dominan el mercado. Esa es toda la preocupación. Sin embargo, me parece que a la que sí se le debe prestar mayor atención es a la subasta que se daría a mediados del próximo año cuando se asigne la franja de los 700MHz donde nuevamente los operadores quieren quedarse con los 90 que se subastarían (10 se dejan libres para que no haya traslape técnico entre una frecuencia y otra).

El tema es que el Estado debería reservar al menos 10 de esos 90MHz para salvar nuestras vidas y subastar los otros 80 para el uso comercial. ¿Cómo es que nuestras vidas pueden depender de 10MHz? Fácil. En desastres naturales y atentados terroristas, las redes comerciales son inaccesibles porque colapsan con la multiplicación de llamadas y tráfico de datos de personas como nosotros, avisando que estamos bien. Ahora imagine a Bomberos y ambulancias tratando de comunicarse y que no puedan en una emergencia por competir con varios adolescentes descargando video de 1GB al mismo tiempo.

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En casos como el 11S, Policía y Bomberos no pudieron comunicarse por falta de una red dedicada a la seguridad. Por esa razón, hoy en Estados Unidos se está construyendo una red nacional de seguridad pública para que Policía y Bomberos puedan comunicarse. En Colombia no deberíamos ser menores a ese desafío. Si no se otorgan al menos 10 de esos 90MHz corremos el riesgo de que nuestras agencias de seguridad y equipos de socorro puedan atender oportunamente una emergencia y se pierdan muchas vidas.

Solemos defender lo tangible como la tierra o el mar, pero el espectro, como no lo ‘vemos’, no lo defendemos. Si tres artículos de la Constitución lo defienden ¿por qué no ayudarle desde la veeduría ciudadana? Seguramente entrarán enormes cantidades de dinero al Estado, pero ¿valen más que la vida de 10 personas o muchas más en caso de un desastre? No creo.