Tras pasar meses de juicio, este viernes un tribunal de California declaró cadena perpetua David (57 años) y Louise Turpin (50 años), de ser responsables de torturar a sus 13 hijos, de entre 2 a 29 años.
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El 22 de febrero la pareja se había declarado culpable de 14 delitos, entre los que se encontraban tortura, abuso infantil y secuestro. Las autoridades querían evitar que los hijos revivieran lo sucedido al declarar contra sus padres.
«No puedo describir en palabras por lo que pasamos mientras crecíamos», dijo Joshua, uno de los hijos que estuvo presente en el juicio y agregó, según Infobae, que «a veces tengo pesadillas de las cosas que pasamos, mis hermanos siendo encadenados, pero eso es el pasado y este es el presente».
La fiscalía informó, cuando se conoció el caso, que las 13 víctimas padecían una desnutrición severa y como consecuencia tenían discapacidades cognitivas y falta de conocimientos básicos. Dijo que la víctima de 29 años pesaba 37 kilogramos.
A las víctimas, que recibieron educación en casa, no se les permitía ducharse más de una vez al año, eran golpeados y estrangulados, agregó Hestrin.
Una de las hijas, de 17 años, que logró salir por una ventana el domingo y llamó al número de emergencias con un celular, había tramado su escape por dos años, comentó el fiscal. Otro de los hermanos escapó con ella pero regresó por miedo.
