En 1997, Hallstatt fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y para muchos de los usuarios de Instagram este sería uno de los pueblos más bonitos de Europa.
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Incluso las cuentas de viajes como Beautiful Destinations o Living Europe suben regularmente imágenes de la localidad tomadas por fotógrafos profesionales o aficionados y acumulan cientos de miles de ‘me gusta’.
El encanto de este pueblo sacado prácticamente de un cuento de hadas se debe al paisaje que lo rodea: por un lado los Alpes y por otro, el lago Hallstätter, el que le sirve como un gran espejo.
A su alrededor es posible hacer distintas caminatas históricas, la que se remonta miles de años atrás cuando celtas, romanos y medievales dejaron su huella en estas tierras, lo convierte en un destino de interés turístico cultural.
Incluso tal es la devoción de los visitantes asiáticos por Hallstatt que no dudaron en replicarlo en China. Una compañía estatal minera china, Minmetals Land, contruyó una réplica del pueblo austriaco en la provincia de Cantón, que copia el detalle las casas, la plaza del mercado y alguno de sus edificios más representativos.
