Estuvo fugitivo 57 años, lo capturaron en 2015 y ahora está libre

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Un hombre de 80 años de edad, quien permaneció como fugitivo durante 57 años y capturado en 2015, fue liberado este viernes.

La historia de Frank Freshwaters parece sacada de un guión de Hollywood. Fue detenido en 1959 tras haber violado su libertad condicional. ¿La razón de su condena? Protagonizar un accidente automovilístico donde murió Eugene Flynt, a los 24 años de edad. 

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Frank estuvo detenido en el Reformatorio Estatal de Ohio, donde se fimó la película «Shawshank Redemption», de donde escapó. En realidad fue detenido en 1975, pero el gobernador de Ohio de aquel entonces, Arch Moore, se negó a extraditarlo, acción legal que derivó en su liberación. 

Sin embargo, Frank Freshwaters no había cumplido su condena impuesta originalmente, por lo que las autoridades lo continuaron buscando, hasta que lo encontraron en mayo de 2015, lo que lo convirtió en la persecuión más larga de toda la historia de Estados Unidos.

Durante todo este tiempo, Frank Freshwaters cambió su nombre a William Harold Cox, y vivía en Brevard County, Florida. Durante este tiempo que permaneció fugitivo, se casó y tuvo hijos. 

Ahora, a sus 80 años de edad, los investigadores dieron a conocer que Frank tiene serios problemas de salud. Eso no es todo, Richard Flynt, hijo de Eugene Flynt, le explicó al jurado que si bien es cierto Frank no ha pagado por el crimen que cometió, mantenerlo en prisión con los problemas de salud que presenta, «sería mayor culpabilidad para nosotros», por lo que decidieron otorgarle el perdón. 

«Salió libre hoy con una gran sonrisa en el rostro», explicó al canal local «Florida Today», Gordon Beggs, su abogado: «Él está muy agradecido con todos aquellos que lo apoyaron con sus plegarias, porque las necesitaba», añadió. 

Aunque comúnmente se le relaciona con la película «Shawshank Redemption», la mejor película del mundo de acuerdo al sitio «IMDB», la historia de Freshwaters es muy distinta. Él no cavó un túnel para huir, simplemente aprovechó la poca seguiridad que había en la granja de la prisión.