El Cairo, 28 nov (EFE).- Las protestas opositoras convocadas hoy por el Frente Salafista egipcio fracasaron en movilizar a la mayoría de sus seguidores para participar en unas manifestaciones marcadas por las grandes medidas de seguridad y la confusión en cuanto a la cifra de víctimas.
El grupo salafista intentó aprovechar la concentración de los fieles en las mezquitas por la oración del mediodía del viernes para celebrar protestas que quisieron defender la «identidad islámica» de Egipto y pedir el derrocamiento del sistema político actual en el país, que tachan de golpista.
En la mezquita de Al Estiqama, ubicada en el barrio cairota de Al Muhandesín y donde estaba convocada una de las protestas, todo se desarrolló de forma natural sin que ninguna persona gritase o levantase pancartas opositoras.
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En el sermón de hoy, el decano de la Facultad de Estudios Islámicos en la Universidad de Al Azhar, Mohamed Abás, criticó la utilización de la religión por razones políticas y precisó que el islam es un «método de vida y no un símbolo de un partido político».
La misma escena se repitió en otras mezquitas donde estaban previstas las protestas y el único barrio donde se registró una manifestación grande fue el de Al Matariya, considerado uno de los bastiones de los Hermanos Musulmanes.
En este sitio se manifestaron brevemente medio millar de personas, según testigos y fuentes de seguridad, antes de que la Policía y el Ejército intervinieran para dispersarla.
Una fuente de seguridad del mismo distrito dijo a Efe que tres personas murieron durante esos choques, sin especificar en qué circunstancias.
Sin embargo, el portavoz del Ministerio egipcio de Sanidad, Hosam Abdelgafar, rebajó esa cifra a un fallecido por disparo de bala, lo que fue confirmado por un responsable del hospital de Al Matariya – a unos cien metros de distancia del lugar de los enfrentamientos-, que agregó que hubo tres heridos.
Los Hermanos Musulmanes elevaron la cifra de fallecidos a cinco, en un comunicado publicado en su página web.
Según pudo constatar Efe, el ambiente en la comisaría de Matariya era muy tenso y varios helicópteros, uno de ellos militar, sobrevolaban la zona, mientras que en la entrada del hospital del barrio, adonde fueron trasladadas las víctimas, había agentes de policía de paisano.
La jornada estuvo marcada por un gran despliegue de la Policía y del Ejército, quienes ocuparon varias zonas de El Cairo, sobre todo alrededor de los edificios gubernamentales y cerca de las mezquitas donde estaban previstas las protestas, mientras que helicópteros militares sobrevolaban la ciudad.
Las fuerzas, que se desplazaban en vehículos blindados, estaban armadas con ametralladoras, rifles de cartuchos y pistolas y contaban con el apoyo de unidades especiales cuyos miembros estaban encapuchados.
El Ministerio de Interior informó en un comunicado de que las autoridades detuvieron en las manifestaciones de hoy -que también se celebraron en otras ciudades como Alejandría, Al Fayum (al sur de El Cairo) y Al Sarqiya (norte)- a 224 personas.
Un portavoz de los Hermanos Musulmanes, Mustafa al Jatib, dijo a Efe que la mayoría de las protestas, incluida la de Al Matariya, fueron organizadas por la denominada Alianza Nacional para la Defensa de la Legitimidad, encabezada por su grupo y que abarca varias formaciones afines, y no por el Frente Salafista.
En declaraciones a Efe, el analista político egipcio Hasán Nafaa reconoció el fracaso de esta convocatoria, lo que, a su juicio, demuestra que la corriente islamista perdió su base popular y que su capacidad para movilizar a las masas ya está limitada.
No obstante, el Frente Salafista se felicitó en un comunicado por el «éxito» de su convocatoria debido al, según ellos, gran número de participantes.
El Frente Salafista es una agrupación de varios predicadores y pequeños grupos islamistas que adopta una ideología radical y lucha por aplicar una interpretación rigurosa de la «sharía» (ley islámica), aunque no defiende abiertamente el uso de la violencia para lograr este fin.
Por otro lado, el portavoz de Sanidad confirmó la muerte de un coronel y un soldado por disparos de hombres armados que viajaban en un coche sin matrícula en la zona de Yisr al Suez, en el este de la capital egipcia.
Mientras, el Ministerio del Interior informó de que dos oficiales de la Policía y cinco civiles resultaron heridos por el estallido de un artefacto al paso de un vehículo de seguridad en la población de Abu Kabir, en la provincia de Al Sharqiya.
Jorge Fuentelsaz y Mohamed Siali
