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Nueva Delhi, 25 nov (EFE).- La Cachemira india, reclamada por Pakistán, registró hoy una alta participación en la primera fase de sus elecciones regionales, en las que el hinduista Partido Bharatiya Janata del primer ministro Narendra Modi vislumbra por primera vez la posibilidad de liderar una coalición en el único estado de mayoría musulmana de la India.
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Alrededor de un millón de los 7,2 millones de electores censados estaban llamados hoy a las urnas en la primera de las cinco fases en la que se dividen las elecciones en una de las regiones más militarizadas del mundo.
Según fuentes de la Comisión Electoral, un 70 % de las personas hoy llamadas a las urnas depositaron su voto para elegir a sus representantes en 15 circunscripciones de un total de 87, frente al 60 % que lo hizo en 2008.
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El resto de jornadas electorales se celebrarán el 2, 9, 14 y 20 de diciembre, mientras que el recuento se llevará a cabo el 23 de este mes.
La jornada electoral transcurrió sin incidentes graves en la región del Himalaya que ha sufrido una insurgencia independentista desde la década de 1990, que casi ha desaparecido en los últimos años.
A pesar de ello, las autoridades desplegaron un gran número de fuerzas de seguridad en los colegios electorales ante los temores a ataques.
Los grupos separatistas han llamado al tradicional boicot de las elecciones, pero el líder del movimiento Hurriyat, Syed Alí Geelani, ha decidido no imponer la prohibición del voto, por lo que el bloqueo electoral es más suave que en otras ocasiones, lo que ayudó a la afluencia de votantes.
«He decidido participar en las elecciones y votar por el cambio», dijo Nisar, un joven de 24 años, a la agencia local IANS.
Un cambio que puede golpear a la gobernante Conferencia Nacional (CN) liderada por Omar Abdulá y que ha ostentado el poder en la región durante buena parte desde la independencia india en 1947, que llega muy debilitada a los comicios tras cinco años en el poder.
En las elecciones que llevaron al poder a Modi en mayo, el BJP logró tres de los escaños del estado de Jammu y Cachemira, el mejor resultado de la formación en la región y que analistas creen que podría repetir, lo que le abriría la puerta para gobernar en coalición.
«Pido a mis hermanos y hermanas de estos estados que salgan y voten», afirmó Modi en su cuenta de Twitter.
El principal escollo del BJP es su promesa de las elecciones generales de eliminar el artículo 370 de la Constitución india, que concede especiales poderes autonómicos a Jammu y Cachemira.
El opositor Partido Democrático Popular (PDP) de Mehbooba Mufti, que al igual que Abdulá es hija de un exgobernante de Cachemira, obtuvo los otros tres escaños en los pasados comicios generales de la región y se perfila como uno de los favoritos.
La Cachemira india es el principal punto de enfrentamiento entre la India y Pakistán desde la creación de ambas naciones en 1947 y por ella han mantenido tres guerras y varios conflictos menores.
La India ha acusado en reiteradas ocasiones a Pakistán de permitir la infiltración de militantes propaquistaníes o separatistas en su territorio a través de la frontera provisional que divide las dos Cachemiras.
Por su parte, el estado de Jharkhand registró en la primera de las cinco fases electorales -con las mismas fechas que en Cachemira- una participación del 61,9 %.
Aunque se produjeron algunos incidentes menores, como el descubrimiento de una mina, la jornada transcurrió con normalidad en este estado del este de la India afectado por la insurgencia maoísta.