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Erdogan anula una recepción en su polémico palacio por el accidente minero

Estambul, 29 oct (EFE).- El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha anulado la recepción oficial por el Día de la República, que iba a celebrarse hoy por primera vez en el recién construido palacio presidencial, al considerar que sería una falta de respeto a los mineros atrapados desde ayer en un pozo y por cuya vida se teme.

«Anulamos la recepción de esta tarde. No se hará. No nos parece correcto celebrar una recepción mientras sufren las familias afectadas por el accidente», dijo Erdogan, en referencia a los 18 mineros que han quedado atrapados por la inundación de una galería en una mina de carbón en Ermenek, en el centro del país.

El nuevo edificio, bautizado como «Ak Saray» (Palacio Blanco), sustituye como residencia del jefe del Estado al Palacio de Çankaya, elegido en su día por el propio fundador de la república, Mustafa Atatürk.

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Cuando el edificio comenzó a construirse su destino original era ser ocupado por el primer ministro, cargo que entonces ocupaba Erdogan.

Con una superficie de 300.000 metros cuadrados y tres bloques de edificios que suman 1.000 habitaciones, el nuevo palacio supera en tamaño a las residencias oficiales de cualquier otro jefe de Estado del mundo.

El líder de la oposición, el socialdemócrata Kemal Kiliçdaroglu, ya había anunciado días atrás que no acudiría a la recepción por considerar la construcción del nuevo palacio un injustificable despilfarro de dinero.

Los socialdemócratas han pedido una investigación parlamentaria sobre la construcción del edificio.

El edificio se construyó pese a una orden judicial que ordenó parar la obra tras una denuncia presentada por arquitectos e ingenieros que argumentaron que se habían vulnerado normas medioambientales.

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