mundo

Netanyahu centrará su discurso en Irán y en el yihadismo global

Jerusalén, 28 sep (EFE).- El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, pondrá el foco en Irán en su próxima comparecencia mañana lunes ante la Asamblea General de la ONU, en la que sugerirá que no se cierre ningún trato con Teherán que no incluya su desmantelamiento total de su programa nuclear.

El jefe del Ejecutivo israelí, que parte este domingo hacia Nueva York tras la celebración del año nuevo judío o «Rosh Hashaná», tratará de defender también su idea de que todos los movimientos islamistas son iguales, sin diferenciar organizaciones tan alejadas en objetivos e ideologías como Hamás o el Estado islámico.

«La ambición compartida más grande es el dominio regional y, en última instancia, global, sin contemplar los derechos humanos, el pluralismo o la democracia, sino más bien la adhesión a la violencia contra su propio pueblo y todos los demás», afirmó en una entrevista de año nuevo con el diario «Jerusalem Post».

Recomendados

Netanyahu intervendrá ante el plenario de la ONU el lunes, y el miércoles tiene fijado un encuentro en Washington con el presidente de EEUU, Barack Obama, con quien se reunió por última vez en marzo, dijo a Efe el portavoz del primer ministro para medios extranjeros, Mark Reguev.

Su regreso está previsto antes de que se conmemore en Israel el Yom Kipur, la jornada más solemne del calendario hebreo, que comienza al anochecer del viernes 3 de octubre y en el que país se paraliza por completo.

El político derechista tiene concertados además encuentros de alto nivel con otros dirigentes mundiales que participan a partir de esta semana en el inicio del período de sesiones de la Asamblea General.

Incluso cuando la agenda internacional parece estar dominada por el avance del islamismo radical suní, con el Estado Islámico (EI) en la vanguardia de la información, el jefe del Gobierno israelí volverá a centrarse en la cuestión iraní.

Israel observa con «enorme preocupación» el aparente avance del proceso de negociación entre el régimen de los ayatolá y el grupo 5+1 en busca de una solución a la polémica sobre el controvertido programa nuclear de Teherán.

En las semanas pasadas, diversos responsables israelíes han intensificado su campaña para evitar cualquier tipo de acuerdo con Irán, que insiste que su programa no tiene una dimensión militar

Netanyahu reiteró en la entrevista de año nuevo que «Irán es la mayor amenaza para el futuro de Israel» y en un difícil giro dialéctico deslizó el temor de que si desarrolla armas nucleares éstas puedan caer en manos de los islamistas.

El ministro israelí de Inteligencia, Yuval Steinitz, regresó recientemente de Washington, donde participó en el encuentro bianual del diálogo estratégico con EEUU en el que entre otros asuntos estudió las vías de colaboración para combatir al EI.

Y emitió un comunicado en el que aseguraba que «la guerra civil en Irak se resolverá, pero el mundo tendrá que lidiar con un Irán nuclear durante decenas de años».

Según Steinitz, el debate con sus homólogos estadounidenses se centró en las conversaciones nucleares con Irán, en la lucha contra el EI y otros grupos yihadistas en la región, así como la reconstrucción de Gaza tras el último conflicto bélico del pasado verano.

Una conexión y una visión que el Departamento de Estado estadounidense no parece compartir a tenor por su comunicado al término de esa visita, en la que no mencionó a Irán.

En el mismo apuntó a que se analizaron «acontecimientos en la región y el reforzamiento de los compromisos compartidos en la lucha contra el terrorismo y para impedir amenazas a la estabilidad regional».

Previsiblemente, Netanyahu dejará poco espacio para analizar la situación en Gaza o el estancado proceso de paz con los palestinos, adelantan los analistas, pese a que el viernes el presidente Mahmud Abas exigió un fecha fija para el fin de la ocupación israelí y la declaración del Estado palestino.

Si no, amenazan los palestinos, será momento de acudir al Tribunal Internacional y denunciar tanto la ocupación como los posibles crímenes de lesa humanidad cometidos por Israel, incluido el bloqueo económico y el asedio militar que impone desde hace ocho años a Gaza.

La última ofensiva militar israelí contra la Franja causó más de 2.100 fallecidos palestinos, 11.000 heridos, además de 18.000 viviendas destruidas, mientras que en el lado israelí perdieron la vida 70, de ellos 66 militares.

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU creó una comisión que investigará si se ha vulnerado el derecho internacional ante las sospechas de que se registraron crímenes de guerra en Gaza.

Ambos contendientes están emplazados a retomar el diálogo en los próximos días para aplicar el alto el fuego, que incluye el alivio paulatino del bloqueo a Gaza.

Una negociación que Netanyahu insistió esta semana en calificar «de seguridad y no de paz».

Tags

Lo Último

Lo que debe saber


Te recomendamos