Washington, 29 ago (EFE).- Estados Unidos impuso hoy nuevas sanciones contra más de una treintena de individuos y entidades iraníes por su vínculo con el desarrollo del programa nuclear de Irán, entre otras actividades, mientras prosiguen las negociaciones con Teherán para llegar a una solución integral al respecto.
«Hoy tomamos medidas adicionales en nuestros esfuerzos para mantener la presión sobre el gobierno de Irán», explicó la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Caitlin Hayden, en un comunicado.
«En concreto, los Departamentos del Tesoro y de Estado impusieron sanciones a varias empresas e individuos que participan en actividades de apoyo al programa nuclear de Irán, apoyan el terrorismo, o ayudan a Irán a la evadir las sanciones internacionales», agregó Hayden.
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Las acciones del Departamento de Estado recayeron en cuatro entidades que, según los datos del Gobierno estadounidense, proveen a Irán de material necesario para seguir desarrollando su programa nuclear.
Las entidades son la Organización para la Innovación e Investigación en Defensa (SPND), el Instituto de Ciencia Nuclear e Investigación Tecnológica (NSTRI), la compañía Jahan Tech Rooyan Pars (Jahan Tech) y Mandegar Baspar Kimiya Company (Mandegar Baspar).
La acción contra más de 25 entidades e individuos «involucrados en la expansión de programas de proliferación nuclear de Irán, apoyan el terrorismo en la región y ayudan a Irán a evadir las sanciones internacionales y de EE.UU. refleja nuestra determinación de seguir tomando medidas contra cualquiera, en cualquier lugar, que viole nuestras sanciones», dijo el subsecretario para Terrorismo e Inteligencia Financiera, David Cohen.
Altos funcionarios explicaron que estas medidas respetan la extensión del Plan Conjunto de Acción establecido en las negociaciones del Grupo 5+1 (EE.UU., Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania) e Irán que se amplió el pasado julio y por el que continúan en vigor una serie de sanciones para mantener la presión sobre Teherán.
«Durante este período de prórroga del Plan de Acción Conjunto, mientras cumplimos nuestro compromiso de proporcionar un alivio sobre ciertas sanciones, seguimos comprometidos a hacer cumplir las sanciones que permanecen contra Irán», agregó Cohen.
Los oficiales también detallaron que algunos de los individuos y entidades sancionadas están vinculadas al apoyo del terrorismo y al régimen sirio de Bachar Al Asad, no reconocido por Estados Unidos como presidente del país.
La hoja de ruta acordada el pasado noviembre entre esas potencias e Irán fijó el 20 de julio como fecha límite para lograr un acuerdo definitivo, pero finalmente se procedió a una extensión.
El acuerdo final deberá encontrar un equilibrio entre la reivindicación iraní del derecho a enriquecer uranio y la exigencia de la comunidad internacional de que renuncie al desarrollo del armas nuclear.
Washington, 29 ago (EFE).- El Gobierno de Estados Unidos pidió hoy «respetuosamente» a Irán liberar a los estadounidenses Amir Hekmatí, Saeed Abedini, Jason Rezaian y Robert Levinson, detenidos en ese país acusados de supuestas actividades de espionaje.
En un comunicado de prensa, el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, hizo un llamamiento al Gobierno iraní a trabajar en cooperación con su país para devolver a estos ciudadanos a sus familias.
«Ya es hora de que devuelvan a casa a Hekmatí», un exmarine nacido en Estados Unidos en 1983, de padres iraníes, que fue detenido hace tres años, «acusado de falsos cargos de espionaje, mientras visitaba a su familia en Irán», precisó el comunicado
Sobre Robert Levinson, un exagente del FBI que desapareció en Irán en 2007, y que según la prensa estadounidense trabajaba informalmente para la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Kerry expresó su inmensa preocupación por su bienestar y su paradero.
Asimismo, precisó que el 26 de septiembre se cumplirán dos años desde que Abedini fuera retenido en Irán y condenado a ocho años de prisión «por cargos relacionados con sus creencias cristianas».
Sobre Jason Rezaian, de 38 años, corresponsal en Teherán de The Washington Post y cuyo paradero se ignora desde que fue detenido el 22 de julio pasado junto a su esposa, Yeganeh Salehí, corresponsal del periódico emiratí The National, Kerry aseguró que «su amor por Irán se refleja en sus reportes».
Según Reporteros Sin Fronteras, Irán tiene en la actualidad 65 periodistas y blogueros detenidos, cinco de ellos extranjeros, la mayoría acusados de delitos como «atentar contra la seguridad nacional», «hacer propaganda contra el Estado», «difundir falsedades» o «perturbar el orden público».
Estados Unidos reafirmó su compromiso de seguir abogando por vía diplomática para la liberación de estos ciudadanos en cooperación con las autoridades iraníes, señaló Kerry en el comunicado.
