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Muere un cámara ruso en un tiroteo en el sureste de Ucrania

Moscú, 30 jun (EFE).- El cámara del Canal Uno de la televisión rusa Anatoli Klian ha muerto tras resultar herido de gravedad en un tiroteo en la ciudad de Donetsk, en el este de Ucrania.

«Anoche, murió en Donetsk nuestro colega, el cámara Anatoli Klian», informó en la madrugada de hoy el canal en un informativo.

El medio precisó que Klian fue herido en el abdomen cerca de un cuartel militar ucraniano de donde procedió el disparo.

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Según la agencia oficial RIA-Nóvosti, que cita a la jefa del servicio de prensa de la autoproclamada república popular de Donetsk, Klávdiya Kulbátskaya, Klian, de 68 años, iba en un autobús al cuartel militar acompañado por madres de los soldados ucranianos y varios periodistas.

Cuando el autobús llegó al territorio de la unidad, los militares abrieron fuego, matando al cámara y al conductor del autobús.

El «diputado» de la formación separatista Oleg Frolov reveló a la agencia rusa Interfax que el autobús venía decorado con carteles que decían «Hijo, regresa a tu casa» solicitando así a las autoridades que pongan fin el conflicto armado que cobra vidas de jóvenes soldados.

El conflicto se produjo supuestamente después de que los oficiales de la unidad le negaran la entrada a la delegación que viajaba en el autobús.

Además, otra furgoneta con periodistas del canal LifeNews a bordo fue atacada con lanzagranadas cerca de la misma unidad sin que se produjeran víctimas mortales ni hubiera heridos en ese ataque.

Mientras, el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso condenó el ataque y exigió a Kiev llevar a cabo una «investigación objetiva de la tragedia y castigar a los culpables».

«La muerte del periodista ruso de nuevo ha demostrado claramente que las fuerzas de seguridad de Ucrania obviamente no quieren bajar la tensión en el conflicto y bloquean la de por si frágil tregua» que expira hoy, señala el comunicado de la cancillería rusa.

El pasado 17 de junio, el corresponsal de la Radio Televisión Estatal de Rusia Ígor Korneliuk y el técnico de sonido Antón Voloshin murieron en un bombardeo de morteros en las afueras de la ciudad oriental ucraniana de Lugansk, escenario de la sublevación prorrusa.

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