Bangkok, 27 mar (EFE).- El Gobierno de Filipinas y la guerrilla del Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI) firmaron hoy la paz después de 30 años de lucha fratricida, a cambio de la creación de una región autónoma musulmana en el sur del país.
«No permitiré que vuelvan a arrebatarle la paz a mi pueblo», prometió el presidente de Filipinas, Benigno Aquino, en el discurso que precedió a la firma de los documentos ante más de mil invitados en el recinto del Palacio de Malacañang, la residencia de los jefes de Estado filipinos en Manila, en un acto retransmitido por televisión.
Flanqueaban al mandatario filipino en el estrado el jefe del grupo musulmán armado, Murad Ebrahim; la asesora de la Presidencia filipina para el proceso de paz, Teresita Deles; y el primer ministro de Malasia, Najib Razak, cuyo país ha ejercido de mediador.
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La jefa del equipo negociador del Gobierno filipino, Miriam Coronel-Ferrer, y el negociador principal del FMLI, Mohager Iqbal, rubricaron los documentos, cinco páginas que incluyen los acuerdos principales alcanzados desde 1997, cuando comenzó el diálogo.
«Hoy celebramos la victoria del bangsamoro (tierra o pueblo musulmán) y del pueblo filipino», manifestó Murad en su turno, en el que habló de un acuerdo que recoge las aspiraciones genuinas del pueblo musulmán.
El FMLI ha renunciado a la creación de un Estado islámico en el sur de Filipinas por el establecimiento de una región autónoma en 2015 que se llamará Bangsamoro.
«Hoy abrazamos la paz (…) No más guerras, no más evacuados, no más injusticia, no más pobreza. ¡Ya está bien! Estamos cansados. Empieza un nuevo amanecer», indicó Deles, quien inauguró el turno de intervenciones.
El primer ministro de Malasia distinguió el «acto de coraje» de unos dirigentes que tuvieron presente a las generaciones futuras, y ofreció la ayuda de su país al desarrollo de Bangsamoro en infraestructuras, educación, agricultura y otros sectores.
La firma del Acuerdo Completo del Bangsamoro, el nombre oficial del pacto, abre la vía a un proceso legislativo y judicial para establecer la prometida región autónoma.
En este sentido, el presidente filipino destacó la generosidad y desinterés de todas las personas que participaron en el proceso negociador y creyeron en que este día podría llegar.
Aquino animó al Parlamento a imbuirse del mismo desinterés para aprobar las leyes que fundarán la región autónoma Bangsamoro en 2016 y permitirán celebrar elecciones allí ese mismo año.
El presidente del Senado filipino, Franklin Drilon, presente en el acto, se mostró optimista en que este «acuerdo histórico puede conseguir la prometida paz duradera y desarrollo para Mindanao».
Distintas comunidades y organizaciones musulmanes de Filipinas también expresaron su apoyo a esta paz.
No obstante, algunos grupos islámicos, como los Luchadores por la Libertad Islámica del Bangsamoro, la facción del Frente Moro de Liberación Nacional (FMLN) que lidera Nur Misuari o los terroristas de Abu Sayyaf, se oponen a un acuerdo que no ha contado con ellos y han anunciado que continuarán la lucha armada.
El FMLI nació formalmente en 1984 de una escisión, surgida en 1977, del FMLN, en aquellos años la principal organización musulmana en armas del país.
La escisión en el FNLN, fundado y dirigido por Nur Misuari, se produjo por aceptar con el Gobierno de Ferdinand Marcos una solución que excluía la independencia.
El FMLN firmó la paz en 1996 a cambio de gobernar la Región Autónoma del Mindanao Musulmán, un territorio que abarca parte de Mindanao y que se integrará en Bangsamoro.
Entre 100.000 y 150.000 personas han muerto en el sur de Filipinas a causa de la lucha fratricida con los musulmanes.
Bruselas, 27 mar (EFE).- La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, celebró hoy el acuerdo de paz firmado en Filipinas con la guerrilla del Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI) y aseguró que la Unión Europea (UE) apoyará su aplicación.
«La Unión Europea, como apoyo a largo plazo del proceso de paz de Mindanao, miembro del equipo internacional de supervisión y como importante socio para el desarrollo, seguirá prestando su pleno apoyo a la aplicación de este acuerdo», recalcó Ashton en un comunicado.
«La firma de este acuerdo, que debería establecer las condiciones para una paz duradera, es un momento verdaderamente histórico y bien recibido para el pueblo de Filipinas», añadió.
La representante de la UE consideró que este logro reforzará la voluntad de todas las partes para dar los pasos necesarios en la aplicación del acuerdo.
El Gobierno de Filipinas y la guerrilla del Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI) firmaron hoy la paz después de 30 años de lucha fratricida, a cambio de la creación de una región autónoma musulmana en el sur del país a través de un proceso democrático.
El acuerdo, que pone a un conflicto en el que han fallecido 100.000 personas, implica la renuncia del FMLI a la lucha independentista y su compromiso a dejar las armas y promocionar la paz y la estabilidad en la nueva zona.
El FMLI defiende desde 1984, la fecha de su fundación oficial, los derechos de la minoría islámica de Filipinas, que se concentra en el sur de un país en el que más del 90 % de la población es cristiana.
