Caracas, 26 feb (EFE).- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó hoy que ya son 50 los muertos que han dejado las barricadas y «guarimbas» (barreras y actos violentos) en las protestas que desde hace dos semanas se registran en el país contra el Gobierno.
«Ya van más de 50 muertos producto de las barricadas y de la ‘guarimba’. Ayer murió una señora de 84 años aquí en una urbanización del este de Caracas porque la mantuvieron secuestrada por una ‘guarimba’ durante tres horas y murió en el carro de su familia», señaló el mandatario en un acto público.
Maduro ya dijo el pasado lunes que las barricadas colocadas por quienes se manifiestan contra su Gobierno habían causado por entonces 30 muertes por infartos y ataques de asma.
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Las barricadas están siendo colocadas en varios puntos del país sobre todo a primera hora de la mañana y última de la tarde para dificultar el tráfico por las ciudades y suelen estar compuestas de todos tipo de basura a la que, además, suelen prender fuego.
De acuerdo con la Fiscalía, el balance de muertos como consecuencia de las protestas es de 13 personas y de 16, según cifras extraoficiales.
El propio Maduro informó este miércoles de la muerte de un motociclista que el martes chocó contra una barricada incendiada a la que se estrelló por culpa del aceite vertido en la calle.
Caracas, 26 feb (EFE).- La Fiscalía venezolana informó hoy la detención de cinco funcionarios de inteligencia por su presunta vinculación con dos de las tres muertes registradas el pasado 12 de febrero tras una marcha de estudiantes y opositores en Caracas, con lo que subió a ocho el número de agentes de ese servicio apresados.
«El Ministerio Público logró privativa de libertad para cinco funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), por su presunta vinculación con la muerte de Bassil Da Costa y Juan Montoya, ocurridas el pasado 12 de febrero, en (…) Distrito Capital», dice un comunicado de Fiscalía.
El escrito señala que los funcionarios fueron detenidos el lunes pasado y que por el mismo caso ya habían sido privados de libertad otros tres agentes de inteligencia.
Siete agentes fueron imputados por presuntamente incurrir en los delitos de homicidio calificado con alevosía y motivos innobles, uso indebido de arma orgánica, quebrantamiento de pactos y convenios internacionales, asociación para delinquir y obstaculización a la administración de justicia a favor de un grupo de delincuencia organizada.
«Adicionalmente, por los hechos de violencia ocurridos el pasado 12 de febrero (…) está privado de libertad el funcionario del Sebin Melvin Collazo, quien fue imputado por los delitos de uso indebido de arma orgánica y quebrantamiento de pactos y convenios internacionales suscritos por la República», agrega el comunicado.
El 12 de febrero una manifestación pacífica de estudiantes que fue acompañada por otra de sectores de la oposición discurrió por Caracas con reivindicaciones contra las políticas del Gobierno de Nicolás Maduro.
Al término de la marcha, un grupo de personas se descolgó de ella protagonizando ataques contra edificios y vehículos públicos, mientras otros jóvenes corrieron por calles aledañas, donde fueron emboscados.
Bassil Da Costa, un estudiante que participaba en la protesta, y Juan Montoya, miembro de un colectivo chavista, murieron.
Horas después en el este de la ciudad otro joven, Robert Redman, que había participado en la marcha de la mañana, murió a tiros.
El lunes pasado la fiscal general, Luisa Ortega, informó de la detención de tres agentes del Sebin señalados por su presunta vinculación con dos de las tres muertes e indicó que sobre estos casos «se tiene mucha claridad de cómo ocurrieron los hechos».
En la misma exposición la fiscal indicó que ya ascendían a 13 los muertes que han generado las protestas en el país en las últimas dos semanas, un informe que ofreció horas antes de que se produjeran otros dos fallecimientos en manifestaciones en los estados Táchira (oeste) y Aragua (centro).
El pasado 18 de febrero, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, destituyó al general Manuel Bernal como director del Sebin y nombró a Gustavo González, después de haber admitido que miembros del cuerpo incumplieron la orden de acuartelarse el 12 de febrero ante la eventualidad de las movilizaciones en la ciudad.
