mundo

Canadá abandona la convención de la ONU que lucha contra la desertización

Toronto (Canadá), 28 mar (EFE).- El Gobierno canadiense confirmó hoy que se ha retirado de la Convención de la ONU para Combatir la Desertización, el único país del mundo que lo ha hecho, y dijo que es «ineficaz» y «burocrática».

Es la segunda vez en los últimos meses que Canadá se retira de una convención de la ONU. En diciembre de 2012 Canadá materializó su salida del Protocolo de Kioto para la lucha contra el cambio climático que había anunciado en 2011.

Ottawa decidió la salida de Kioto ante la imposibilidad de cumplir sus objetivos de reducción de emisión de gases con efecto invernadero por su voluntad de desarrollar al máximo los yacimientos petrolíferos de las arenas bituminosas de Alberta, una de las reservas de crudo más abundantes del mundo.

Recomendados

El primer ministro canadiense, Stephen Harper, justificó hoy en el Parlamento la decisión de abandonar la Convención para Combatir la Desertización porque «no es una forma eficaz de gastar el dinero de los contribuyentes».

«Sólo el 18 % del dinero que enviamos es gastado en los programas. El resto va a medidas burocráticas», añadió Harper ante las críticas de los partidos de la oposición.

Canadá comunicó el lunes a la ONU su decisión de abandonar la convención, que Ottawa ratificó en 1995 y de la que forman parte los 194 estados miembros de la ONU, y cancelar su contribución de 350.000 dólares al año.

Pero el abandono, que se materializará en 2014, no se conoció hasta hoy.

El ministro de Asuntos Exteriores de Canadá, John Baird, dijo que la contribución canadiense de 350.000 dólares «es un montón de dinero» para los contribuyentes canadienses.

Grupos medioambientales vincularon el abandono con la celebración el próximo mes de una reunión científica auspiciada por la convención que vinculará las sequías que afectan a grandes áreas del globo con el cambio climático.

Durante años, el Partido Conservador de Stephen Harper se negó a vincular el calentamiento global con las actividades humanas. El propio Harper calificó el Protocolo de Kioto como una «conspiración socialista» para transferir la riqueza de los países desarrollados a otras naciones.

Desde que llegó al poder en 2006, el Gobierno de Harper se ha enfrentado en varias ocasiones a la ONU y ha criticado a sus organismos especialmente cuando estos han elaborado informes críticos hacia Canadá como el tratamiento de las minorías indígenas o la seguridad alimentaria en el país.

Tags

Lo Último

Lo que debe saber


Te recomendamos