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Unos mil palestinos apoyan frente a la Muqata la apuesta de Abás por la ONU

Ramala, 25 nov (EFE).- Unos mil palestinos se congregaron hoy frente a la Muqata de Ramala en apoyo a la decisión del presidente palestino, Mahmud Abás, de pedir el próximo jueves a la Asamblea General de la ONU el reconocimiento de Palestina como Estado observador.

Entre los asistentes a la convocatoria, que había sido anunciada oficialmente por la sede presidencial, había numerosos estudiantes y funcionarios de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).

Al inicio del acto, Abás se dirigió a los congregados para subrayar que el reconocimiento en Naciones Unidas permitirá a los palestinos «actuar en todas las agencias e instituciones de la ONU y ser reconocidos como un Estado bajo ocupación».

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«Y, después, el paso siguiente es la reconciliación, que nos proveerá la oportunidad de formar un frente unido contra la ocupación», dijo sobre la división entre las dos principales facciones, Hamás, que gobierna en Gaza, y Al Fatah, que él lidera y vertebra el Ejecutivo de la ANP en Cisjordania.

El próximo jueves, la Asamblea General votará una propuesta de Abás para el cambio de estatus de la delegación palestina a Estado observador.

A diferencia del año pasado, cuando el Consejo de Seguridad rechazó la demanda de reconocimiento de Palestina como Estado de pleno derecho, el «sí» de la Asamblea se da casi por descontado.

Palestina obtendría un estatus similar al del Vaticano, que le permitiría el acceso a varias agencias de Naciones Unidas y a tribunales internacionales como la Corte Penal Internacional.

El Gobierno israelí de Benjamín Netanyahu estudia diversas medidas de represalia contra los palestinos por la iniciativa, que considera una «acción unilateral» que les aleja de una solución negociada al conflicto.

Rabat, 25 nov (EFE).- Decenas de miles de personas salieron hoy a las calles de Rabat para expresar su apoyo al pueblo palestino y denunciar la última ofensiva israelí contra la franja de Gaza en la que murieron más de 166 palestinos y 1.300 resultaron heridos.

En la manifestación, convocada por el Grupo de Acción Nacional de apoyo a Irak y a Palestina, participaron la dirigentes de los partidos políticos, asociaciones de derechos humanos, los principales sindicatos y miembros del movimiento contestatario marroquí 20 de Febrero, entre otros.

El gran ausente fue el ilegalizado movimiento islamista Justicia y Caridad (JyC) que optó por manifestarse junto a otras organizaciones en Casablanca donde, según fuentes del movimiento, consiguieron también reunir a decenas de miles de personas.

«Queremos denunciar el comportamiento inhumano de Israel sobre el pueblo palestino», dijo en Rabat a Efe el ex ministro de Finanzas, Salahedín Mezuar, quien destacó que «los palestinos tienen derecho a la paz, a un Estado y al reconocimiento internacional».

Durante la marcha, encabezada por el presidente del Gobierno Abdelilah Benkirán, los manifestantes enarbolaron banderas palestinas, pero sobre todo mostraron la fotografía del rey Mohamed VI de Marruecos, quien ordenó el pasado domingo la puesta en marcha de un hospital de campaña en la franja de Gaza.

«Condenamos el acto criminal que ejecuta el enemigo sionista contra el pueblo palestino» o «Sionista paciencia, Palestina está excavando tu tumba», gritaban los manifestantes que llegaron en autobuses de diferentes ciudades de Marruecos.

Tan solo la ciudad de Fez, cuyo alcalde es Hamid Chabat, secretario general del Partido Istiqlal, puso a disposición de los ciudadanos 20 autobuses para poder participar en la manifestación de Rabat.

«Gaza es símbolo de orgullo» o «Marruecos no debe formalizar la relaciones con Israel», eran otros de los lemas de las pancartas que levantaban hombres, mujeres y niños.

Rabat no mantiene relaciones formales con Israel desde el cierre, en octubre de 2000, de las «oficinas de enlace» que ambos países tenían en las respectivas capitales.

Aún así, desde esa fecha se han producido viajes ocasionales de altos responsables israelíes a Marruecos con el supuesto fin de buscar una mediación del país magrebí en el conflicto de Oriente Medio.

Las marchas en apoyo al pueblo palestino consiguen congregar en Marruecos a multitud de personas, a diferencia de las protestas llevadas a cabo por problemáticas nacionales, donde el número de participantes suele ser menor.

La manifestación celebrada en marzo por el movimiento JyC en apoyo a los palestinos reunió a 100.000 personas en Rabat, mientras que una semana después 20.000 marroquíes salieron en Casablanca congregados por grupos cercanos al poder para conmemorar el Día de la Tierra, en el que los palestinos protestan por la expropiación de sus tierras y el sistema de asentamientos judíos.

Mañana, las dos cámaras del Parlamento marroquí llevarán a cabo una sesión plenaria para tratar el tema palestino.

Jerusalén, 25 nov (EFE).- Ocho coches aparecieron hoy con las ruedas pinchadas y la inscripción «Gaza precio» en uno de ellos, en el barrio palestino de Shuafat, en el territorio ocupado de Jerusalén oriental, en una aparente acción de israelíes ultranacionalistas, informó la Policía.

La Policía ha abierto una investigación para determinar si se trata de un nuevo caso de la denominada política del «precio», que consiste en ataques contra palestinos y sus propiedades (y en menor medida, soldados) por parte de israelíes extremistas, generalmente colonos.

La referencia a Gaza parece vinculada al lanzamiento de cohetes desde la Franja contra Israel, que causaron seis muertos durante la ofensiva israelí «Pilar Defensivo» este mes, en la que perdieron la vida 164 palestinos, en su mayoría civiles.

«Iba al trabajo cuando me di cuenta de que las ruedas de varios coches estaban pinchadas. No es la primera vez que los residentes del barrio hemos sido víctimas de acciones del ‘precio'», señaló Amin Tamimi, dueño de uno de los vehículos atacados, a la edición digital del diario «Yediot Aharonot».

Otro de los propietarios, Muhamad, acusó del ataque a «adolescentes judíos» que «vienen aquí con regularidad a hacer provocaciones».

Shuafat fue escenario a principios de mes de un incidente similar, en el que fueron pintadas en varios coches las frases «Precio» o «Muerte al enemigo», y otro en junio pasado.

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