Jerusalén, 3 abr (EFE).- El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró hoy que Israel «atacará a quien amenace» a su país, en una rueda de prensa con motivo del comienzo de su cuarto año de gobierno.
«Atacaremos a aquél que amenace con atacarnos», aseguró Netanyahu al aludir no sólo a Irán sino a los grupos armados en Gaza, informan las ediciones electrónicas de los diarios Haaretz y Yediot Aharonot.
El jefe del gobierno habló de las «cuatro amenazas que afronta» su país y que enumeró como: «un Irán nuclear, cohetes, la guerra internética y las fronteras».
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«Tenemos que permanecer vigilantes en nuestra fronteras pero cualquier de las otras puede suponer una amenaza a Israel», subrayó.
En una revisión de sus primeros tres años, el primer ministro prefirió centrarse en los aspectos económicos de su gestión, en lo que puede ser interpretado como el comienzo de la campaña de cara a las próximas elecciones, que están previstas para antes de febrero de 2013, cuando concluye la legislatura.
En sus primeros tres años, el gobierno «ha realizado una serie de reformas y cambios estructurales importantes que han ayudado a la economía a crecer, han reducido las disparidades sociales y han ayudado a Israel a superar la dura crisis de 2008 y 2009».
Para la presentación de sus logros la oficina del primer ministro produjo un vídeo animado e imprimió amplia documentación sobre la reducción del desempleo a niveles sin precedentes (alrededor de 5,5 por ciento), la mejoría en la clasificación de riesgo de Israel por las agencias internacionales, y las medidas introducidas para impedir pronunciadas subidas en la gasolina y la electricidad.
También destacó su compromiso con las reformas sociales iniciadas el pasado verano a raíz de una serie de manifestaciones populares, y que le llevaron a reducir los impuestos a las familias trabajadoras con hijos para fortalecer a la clase media.
«Después de tres años puedo decir que este árbol (Israel) es notablemente fuerte y está creciendo para dar frutos», insistió Netanyahu en un casi interminable recuento de sus logros personales y los de su ejecutivo.
La pasada semana el primer ministro dijo que no tiene intención de pedir un adelanto de las elecciones, más aún cuando las últimas encuestas le garantizan un segundo mandato con una coalición parecida a la actual con los partidos ultraortodoxos y de la derecha más nacionalista.
El de Netanyahu, que no ha producido ningún avance en las negociaciones de paz con los palestinos, ha sido uno de los gobiernos más estables de la historia política israelí y tampoco se prevé que pierda sus riendas durante 2012.
