La hija de un rehén de las FARC culmina una marcha por la libertad, desilusionada con Colombia

Bogotá, 23 feb (EFE).- La joven colombiana Natalia Andrea Duarte, hija de un policía cautivo desde hace doce años por las FARC, culminó hoy en Bogotá una caminata por la libertad de los secuestrados, que la dejó desilusionada con Colombia por la falta de apoyo que se ha encontrado en la marcha.

La joven llegó a la céntrica plaza de Bolívar a las 17.00 GMT, justo cuando terminaba la Segunda Maratón de Mensajes por la Libertad de los Secuestrados y la Reconciliación, que transmitió durante 110 horas seguidas al menos 12.000 mensajes solidarios a través de 2.370 emisoras de todo el mundo.

Duarte iba escoltada por unas cuarenta personas que llevaban camisetas blancas y banderas de ese color, a quienes agradeció el apoyo que le brindaron desde que salió el martes del municipio de Fusagasugá, 64 kilómetros al sur de Bogotá, aunque lamentó no haber encontrado el mismo respaldo en el camino.

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«Estoy muy triste y muy desilusionada de Colombia», dijo y recordó que al llegar a la localidad bogotana de Soacha «la gente empezó a hacer esos rechazos en contra de la paz que estamos pidiendo».

La joven, de 17 años de edad, rechazó la falta de compromiso de los colombianos, comenzando por el Gobierno, y reclamó que la lucha por la libertad no sólo le corresponde a los familiares de los secuestrados, sino al país entero.

Su padre es Carlos José Duarte, intendente de la Policía Nacional a quien las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) secuestraron el 10 de julio de 1999, en un ataque a Puerto Rico, localidad en el departamento del Meta (centro-oeste).

Las Farc se comprometió en diciembre pasado a liberar a seis secuestrados, un militar y cinco policías, entre ellos Duarte, sin embargo hasta el momento no ha informado una fecha para la entrega.

«Son 12 años y 7 meses secuestrado en los que no he podido saber cuál es la imagen de mi papá, no he compartido ni sus regaños, ni sus besos ni sus abrazos. Entonces, ¿qué es esto? Les exijo que me devuelvan lo que me quitaron», exhortó.

Para Natalia Andrea, las FARC están buscando excusas para no liberarlos porque, si de verdad esa fuera su intención, no pondrían «tantas condiciones, tanto impedimento y menos hubieran detenido esas liberaciones».

Por eso, aseguró que si los once secuestrados que actualmente tienen las FARC en su poder no son liberados pronto, irá acompañada de otros familiares a recogerlos a la selva. «Nos tocará meternos allá y obligarlos a que nos los devuelvan», aseguró.

Por otro lado, Carlos Andrés Santiago, uno de los coordinadores del movimiento Colombia Soy Yo, que junto con el programa de radio Las Voces del Secuestro y otras ocho organizaciones de derechos humanos (ONG) celebró en declaraciones a Efe haber leído al aire unos 12.000 mensajes en las últimas 110 horas.

«Se leyeron muchos mensajes, tuvimos testimonios de exsecuestrados, de víctimas, de desmovilizados, pero sobre todo muchos mensajes de solidaridad con los secuestrados por los ciudadanos y ciudadanas de todo el mundo», destacó.

Además, Santiago resaltó que a través de la red social Twitter se registraron alrededor de 170.000 mensajes y llamadas desde Noruega, Australia, Brasil, México, Estados Unidos y Canadá.