Le preguntamos al respecto a Andrés Casas, investigador del Centro de Análisis políticos de Eafit, sobre la administración del actual Alcalde de Medellín Aníbal Gaviria y estas son sus conclusiones:
Positivos:
1. La continuidad en las políticas virtuosas que la ciudad venía haciendo desde el 2014.
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2. Creación de las Vicealcaldías.
3. Dejó la mayoría de las metas de infraestructura terminadas.
4. Los estudios que se realizaron en la ciudad para dejar una política pública de seguridad y convivencia funcionando.
5. Legado de urbanismo social para la seguridad y la convivencia de los territorios.
Negativos:
1. Problemas de comunicación para transmitirle a la ciudadanía sus logros, que quedó evidente en los debates electorales de los aspirantes a la Alcaldía, por una gran ignorancia de la forma en la que se invirtieron los presupuestos.
2. Trabajar una imagen más cercana al ciudadano, fueron otros funcionarios los que lograron destacarse como autónomos.
3. No logró mantener vivo el “El bien público de ciudad” que se construyó desde Fajardo, la ciudadanía vio a Aníbal Gaviria como alguien por fuera de ese proyecto.
4. La tragedia del Space, muestra la falta de regulación de lo privado, no consiguió dar una batalla para que lo público logre domesticar lo privado en la ciudad.
5. El segundo lunar más grande es el mantenimiento del control territorial por parte de estructuras criminales en toda la ciudad, donde la cultura de la ilegalidad convive con la cultura de la vida formal. El Alcalde no logró trastocar ese nervio.