El presidente de Fenalco, Guillermo Botero, presentó los resultados del IX Censo Nacional de Mermas y Prevención de Pérdidas del Mercado Minorista y manifestó su preocupación por el crecimiento de robos en el país.
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De acuerdo con Botero, la gran problemática se ve reflejada en el aumento de los robos internos, es decir, realizados por los mismos trabajadores de los supermercados. “El aumento es del 126% con respecto a 2011, esto nos preocupa enormemente, por lo que se debe fortalecer la rigurosidad a la hora de contratar el personal”.
Por otra parte, Botero destacó que hubo una reducción de los robos externos, los perpetuados por personas externas al almacén, aunque sigue siendo alto, ya que se mostraron pérdidas de $67.754 millones.
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Además del aumento de los robos en el mercado minorista, el presidente de Fenalco aseguró que los ladrones han cambiado sustancialmente el objetivo. De acuerdo con Botero: “Antes los artículos que más se robaban eran las cuchillas de afeitar, el atún y la ropa, ahora los electrodomésticos y los objetos digitales marcan la parada, lo que aumenta inevitablemente el monto del hurto”.
Leonardo López, director comercial del Centro de Investigación del Consumidor, aseguró que el objetivo de estos robos es la reventa. “Hay dos destinos de estos robos: para la reventa en sitios específicos de la ciudad como el Hueco, en Medellín, o para vender artículos por internet”.
Por otro lado, Botero destacó dos avances positivos en este nuevo censo. “El uso de los niños para el robo disminuyó considerablemente, incluso salió de la lista de las 15 modalidades más usadas y además, la leche en polvo desapareció de los primeros lugares de los artículos más robados, lo que significa que este producto tan codiciado, y que ha sufrido una crisis en los últimos meses, no se ha visto afectado por los robos”.
El censo se realiza en todo el país y representa el 92,46% del total de las ventas de los supermercados, quienes están trabajando en fortalecer sus sistemas de vigilancia.
Muchos de los mercados minoristas se han asociado con la empresa de seguridad Alto, especialista en combatir estos robos, logrando judicializar 22.000 incidentes a nivel nacional, de los cuales el 70% corresponde a personas reincidentes y a bandas organizadas, que se dedican a azotar las tiendas para luego vender la mercancía robada en los mercados negros.