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El periodista bogotano falleció este viernes 26 de abril a los 85 años.
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Fue presidente de Independiente Santa Fe de 1972 hasta 1981. En esa época, en 1975, el equipo bogotano consiguió su sexta estrella y además, trajo a Monaguillo, el león que por años fue la mascota oficial de los ‘cardenales’.
El 22 de enero del 2000, fue secuestrado por las FARC cuando se encontraba en su finca. El 13 de agosto de ese mismo año miembros del ejército lo rescataron. En consecuencia a este hecho y una serie de bombas que pusieron en Bogotá, la Conmebol había tomado la decisión de cancelar la Copa América que estaba planeada para realizarse en Colombia en 2001.
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¿Por qué le decían ‘La Chiva’?
Guillermo ‘La Chiva’ Cortés había hecho un relato en la Revista Soho del porqué de su apodo, el cual lo acompañaría desde los 6 años de edad, por el resto de su vida.
Contó él que se encontraba en el Gimnasio Moderno en el descanso y que recibió un codazo de unos de sus compañeros: “Estábamos jugando un partido de fútbol y uno del otro curso me pegó un codazo en la nariz que me hizo sangrar como un loco”. Por lo que tuvo que quitarse la camisa.
“Como no tenía nada más que ponerme, y no podía estar sin camisa el resto del día, la profesora decidió ponerme el manguito que ella tenía puesto. ¿Qué era eso? Un chalequito abierto, chiquito y corto, que en este caso, era de piel de oveja blanca”, escribió.
Cortés sabía lo que sucedería: “Hay que ser gimnasiano para entender la angustia que me dio verme puesto el manguito. Sabía la montadera que se me venía, pero no me quedó más remedio que usar el manguito”.
Cuando sus compañeros de clases regresaron del recreo lo vieron vestido así, empezó el matoneo: “’¡Miren a la chiva!’, ‘¡ay, la chivita!’, ‘¡tan linda la chivita!’”, relató el periodista y exdirigente de Santa Fe.
Durante los siguientes tres años el mote de “la chiva” le causó mucho disgusto, tanto que siempre se iba a los puños con sus compañeros.
“Después ya me fui acostumbrando al apodo y se volvió tan familiar que cuando alguien me dice Guillermo, yo le digo que la única persona que me decía así era mi mamá”, narró el periodista y exconcejal de Bogotá.
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