La realidad es que la moda está cambiando y es fundamental que estos cambios tengan en cuenta la sostenibilidad y sus efectos duraderos. Se ha vuelto necesario disminuir nuestro ritmo de consumo y consumir con más responsabilidad.
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En ese sentido se hace necesario que los diseñadores sean quienes impulsen con sus diseños a que los consumidores sean más conscientes, en vista de esto hay quienes ya hacen parte del cambio.
El colombiano Christian Colorado ha centrado su mirada en destacar la moda de una manera transgresora y diferente, buscando siempre despertar conciencia social. Este joven diseñador hace parte de esa nueva generación de diseñadores que triunfan no solo en nuestro país sino también en las grandes pasarelas del mundo. Y es que después de cerrar grandes colaboraciones con marcas y artistas, de presentar sus creaciones en las pasarelas de Nueva York, su creatividad no pasa desapercibida.
Por esta razón Fontanar invitó a Christian a ser parte de su primera creación de moda con un enfoque sostenible, así surgió la idea de desarrollar un concepto llamado “Wearable Bags”, prendas que ofrecen una doble funcionalidad. Hablamos con el diseñador sobre esta idea de moda.
¿Qué es la Wearable bag?
Se trata de prendas que ofrecen una doble funcionalidad a quienes las usan, pues son chaquetas que pueden ser utilizadas como bolsas, las cuáles, además de ser muy funcionales también tiene múltiples aportes a la moda: el primero, y más importante para nosotros, es que aporta al medioambiente, la segunda es el estilo, y la tercera es la comodidad que ofrecen ya que las personas ya no tendrán que cargar bolsas plásticas o adicionales pues todo lo podrán llevar en su chaqueta. De esta manera queremos mostrarle al mundo que podemos tener estilo mientras cuidamos del medio ambiente.
¿Cómo fue el proceso de diseño?
Las weareble bags son una idea que llevamos gestando durante más o menos 2 años, tiempo en el que ha sido posible pulirlos y mejorarlos gracias a las oportunidades que hemos tenido de presentarlos como una solución para el medio ambiente y para muchas personas que quiere disminuir su huella en el mundo.
Su debut fue en febrero de 2020 durante la semana de la moda de NY y ahora se materializó en la colaboración que presentamos con Fontanar Centro Comercial. Es uno de los proyectos más lindos que he desarrollado porque con él no solo estamos democratizando la moda sino que también estamos ayudando al planeta, de la mano de uno de los centros comerciales en Colombia que más se ha destacado por su sello de responsabilidad social.
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¿De qué materiales está hecha?
Utilicé como principal material el poliéster, y nos enfocamos en implementar una paleta de colores neutra pero muy actual. Por eso, a lo largo de la colección será posible ver colores como el blanco, negro, en presentación monocromática principalmente
Parece que la gente cada vez más sabe sobre los impactos negativos que conlleva las cadenas de moda rápida, pero las desigualdades y la precariedad aumenta y acaba mandando el precio más bajo. ¿Qué le sugiriría a aquellos que están concienciados pero que no pueden pagar más para adquirir moda sostenible?
Siempre hay dos caras en todo, siento que así como somos consientes de que comemos tenemos que ser conscientes de lo que usamos, de donde viene, quien lo hace, cómo nos afecta ambiental, social y económicamente, y, a partir de allí, tomar las mejores desiciones para aportar nuestra parte.
¿Qué podrían hacer las marcas para incentivar la moda sostenible?
El punto de partida es educar al consumidor por medio de campañas que impacten y den a entender a los consumidores que toda decisión que tomamos en cuanto moda tiene una repercusión en el planeta.
¿Cómo le gustaría imaginar el mundo de la moda en los próximos años?
Me lo imagino como una industria inclusiva, consiente y justa
¿Cuánto ha madurado Christian Colorado desde sus inicios hasta hoy?
Como marca siento que hemos evolucionado bastante. Decirte «cuanto» sería casi imposible, pero si podría decir que constantemente estamos creciendo y madurando para ofrecer nuevas y mejores colaboraciones y propuestas que nos permitan generar un impacto social y cultural importante.
Desde su propia experiencia, ¿cómo puede hacer un diseñador joven, o en la cima, para tener su propia voz a pesar de las presiones económicas, o de las propuestas que atenten contra su integridad?
Lo más importante para mi, y a partir de mi experiencia, se resume en mantener la esencia de lo que somos. Buscar responder a nuestros deseos y confiar en nuestra creatividad, sin buscar pretender ser cosas que no somos, y empoderarnos de nuestros propios procesos y caminos para seguir manteniendo eso que nos hace tan de a pie, tan nosotros.
¿Cómo define en estos momentos la identidad de sus diseños?
Los defino con una palabra muy compleja pero simple a la vez, y es la individualidad, en el sentido de que mis propuestas, mis diseños, buscan despertar esa particularidad única de cada persona para que se expresen desde su propia forma de ser y de ver la moda. Para mí resultan como una herramienta que me gusta entregarle a las personas para que se expresen.
¿Cómo hace para tener una voz única, que vaya más allá de las referencias? Este es uno de los puntos más polémicos en el diseño actual.
Siempre lo ha sido y será uno de los puntos a siempre discutir en nuestro nicho. Pienso que la mejor manera de hacerlo es creando y manifestando nuestra propia perspectiva de la moda, dejando de seguir patrones, investigando constantemente para desaprender y volver a aprender lo mejor de nuestro arte, y, por supuesto, buscar siempre evolucionar en nuestro lenguaje y conceptos.
Con tanto recorrido, ¿la moda es para usted un sueño o un negocio?
Esto es algo que confluye y uno es el resultado del otro. En un principio surgió como un sueño, como un proyecto de vida por forjar. Con el tiempo, ese sueño formó un negocio y, de igual manera, ese negocio se ha encargado de formar no solo un sueño sino muchos.
