Stephen Michael Paris nunca imaginó que la muerte de su madre el pasado 1 de abril lo terminaría “entregando” a la justicia luego de más de 36 años prófugo.
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El sujeto había sido condenado a 9 años en prisión por posesión y distribución de drogas en el Centro Correccional Jess Dunn en Muskogee, Oklahoma, indica Katu2.
Cuando llevaba 19 meses tras la rejas, en octubre de 1981, Paris escapó de la cárcel y nunca más pudieron encontrarlo.
Sin embargo, el fallecimiento de su progenitora lo dejó al descubierto, ya que en el obituario de Joann W. Rahimi se anunciaba que “sobrevivían su esposo de 41 años, Homayoun Rahimi, su hijo Steve Chavez, su hermana Janie Ward y su hermano Chris”.
Steve Chavez era el seudónimo que utilizaba Stephen Michael Paris desde joven, por lo que fue ubicado en su lugar de trabajo en el área de Houston.
El hombre se entregó sin oponer resistencia y tras revisar sus huellas dactilares se comprobó su identidad.
