El caso Nahir Galarza parece no agotarse. Luego de que la joven asesinara a su «ex” pareja, Fernando Pastorizzo, durante la noche del 29 de diciembre, los detalles y aristas en esta investigación no paran.
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Desde el 2 de enero la imputada se encuentra cautiva en la Comisaría del Menor y la Mujer de Gualeguaychú, en donde ha vivido altos y bajos a la espera de su juicio oral.
Luego de que su antiguo abogado, Víctor Rebossio, pidiera fallidamente tres veces que la joven fuera excarcelada, su familia decidió prescindir de sus servicios en el futuro.
Es así como contrataron a un nuevo defensor, el elegido fue José Ostolaza, un letrado que ya ha defendido a narcos y casos de trato de personas, por lo que un “simple” asesinato no significaría mayor desafío para el controvertido abogado.
Su próximo desafío será durante una cuarta audiencia, en la que él junto al resto de los defensores volverán a pelear la prisión domiciliaria para Nahir. La instancia está fijada para el próximo 4 de marzo, pero por razones de salud, su nuevo abogado no podrá estar presente en tribunales para esa fecha.
Cuando el futuro del “bombón asesino” ya ha entrado en la recta final, ocurrió un traspié con su nuevo abogado; tendrá que ser operado de una rodilla, lo que lo aislará de las labores profesionales por varios días.
La intervención quirúrgica impedirá que Ostolaza esté presente en la audiencia fijada para este domingo, por lo que pidió una prórroga, pues “no confía en nadie” para que se encargue de su protegida.
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La petición ya fue presentada en el Tribunal de Gualeguaychú, y de ser denegada, la audiencia se realizaría el día en que estaba fijada con o sin el defensor.
Según medios locales, el temor de Ostolaza es que la prisión preventiva se amplíe otros 30 o 60 días hasta el inicio del juicio oral, por lo que prefiere pedir dos semanas para recuperarse y luchar por impedirlo.
Esta es una semana clave para la causa, pues se entregarán los resultados del informe psiquiátrico realizado a la chica, que entre otras cosas, esclarecerá si la joven asesina es capaz de diferenciar entre el bien y el mal.
Con ese paso se cerraría la etapa de investigación, dando inicio al juicio fijado para mediados de marzo. El desafío de las autoridades será esclarecer si este crimen fue accidental, como declaró ella en su último testimonio, o intencional, versión que Galarza admitió el mismo día del asesinato.