Luego de 16 operaciones, las voraces verrugas del hombre mundialmente conocido por tener extremidades parecidas a las de un árbol, volvieron a crecer en el mismo lugar.
PUBLICIDAD
Tras seis meses de recuperación luego de las múltiples cirugías, Abul Bajandar no estaba totalmente curado y ahora, los médicos no saben si un nuevo tratamiento surtirá algún efecto en su organismo.
Fue durante la adolescencia cuando este hombre proveniente de Bangladesh comenzó a ver cómo de sus manos crecían unas extrañas cortezas de árbol. La afección conocida como epidermodisplasia verruciforme, es una enfermedad genética en la piel que ha sido diagnosticada en solo cuatro personas a lo largo del mundo.
Las operaciones a las que se sometió Bajandar el año pasado, lo hicieron perder cinco kilos de enormes protuberancias. Él, su familia y los médicos se sentían esperanzados luego de los tantos procedimientos a los que fue sometido.
Lamentablemente, no pasaron muchos meses antes de que la enfermedad comenzara a volver. Apenas pudo cumplir el sueño de abrazar a su hija, cuando notó que sus impresionantes verrugas volvían a emerger de sus manos y pies.
“Ahora vuelvo a sentir dolor. No puedo doblar los dedos así que necesito la ayuda de mi mujer o a veces de mi madre, que me visita ocasionalmente, para comer. No sé si alguna vez estaré curado y volveré a casa o a trabajar”, lamentó el hombre en entrevista con Agencia EFE.
Según trascendió, la enfermedad se comenzó a desarrollar a sus cortos 15 años, pero recién a los 20 se volvió una real molestia.
PUBLICIDAD
Bajandar lleva alrededor de dos años internado en una cama de hospital, a la interminable espera de encontrar una cura a su complicada afección. La esposa de Abul, Halima Akter, pasa sus días comiendo junto a su hija en el casino del hospital , y durmiendo en una habitación de la unidad de quemados dentro del mismo recinto.
Por su lado, los médicos tratantes desconocen cómo avanzará la enfermedad, y descartaron que este sujeto sea dado de alta “en un futuro próximo”.