“Me mata de orgullo”, “bellísima actitud”, “necesitamos personas como tú”. Estas son sólo algunas de las frases de respeto y cariño que ha recibido Silviane Cunha luego de una acción que llevó tranquilidad a otra mujer de la ciudad de João Pessoa en el estado de Paraíba en Brasil.
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Silviane viajaba en un bus de la línea 5100 y se cambió de asiento para escapar del calor. Al sentarse, encontró un papel entre el asiento y la “pared” del vehículo. Cuando lo abrió halló 600 reales y una cuenta de una tarjeta de crédito por valor de 564 reales.
Según indica el Jornal Da Paraíba, la mujer cuenta que no lo pensó dos veces, al día siguiente pagó la factura y realizó una publicación en Facebook para tranquilizar a Claudineia Santos Lima, el nombre de quien aparecía en la cuenta.
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“La persona que lo perdió debe estar desesperada, en esta crisis hace mucha falta. Quien pueda conocerla puede decirle que la factura está paga”, fue parte de su posteo, el que se compartió más de 10 mil veces.
Al poco tiempo, y ante el éxito de la publicación, el hijo de Claudineia la vio en las redes sociales y le contó a su madre, que no daba crédito a lo que estaba pasando.
“Le agradecí mucho a Dios, había pasado todo el día rezando para que una persona de bien encontrara mi dinero”, contó la mujer, que finalmente se reunió el sábado con su “salvadora”.
“No sé de dónde hubiera sacado ese dinero, ella fue un ángel que entró en mi vida», reconoció Claudineia.
Por su parte, Silviane dijo que no esperaba que su acción tuviera “tanta repercusión” y lamenta que su historia haya logrado tal alcance sólo porque no es “algo común hoy en día”.
“Era algo que no era mío, la decisión obvia era pagar, es lo justo”, sentenció.