Cerca de 45.000 personas asistieron al III Festival Internacional de Música Clásica de Bogotá que este año tuvo como eje la Rusia Romántica, informaron hoy fuentes de la organización.
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«Balance más que satisfactorio, al vender el 85 % de la capacidad de los escenarios. Los resultados artísticos son notables, inmejorables, todas las orquestas y los grupos de cámara han sido sobresalientes», dijo el director general del Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, Ramiro Osorio Fonseca, en un comunicado.
El evento que finalizó ayer con el concierto ejecutado por la Orquesta Nacional Rusa, fue aclamado por el público que también destacó el recital de piano del maestro ruso Mijail Voskresensky y el ballet La Bella y la Bestia.
Al término de los cuatro días de música, los diferentes escenarios contabilizaron la entrada de 43.877 personas «lo que constituye un éxito para el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, organizador del evento», añadió Osorio.
Otros conciertos con gran afluencia de público fueron los primeros ofrecidos por la Orquesta Nacional de Lucerna y el Trío Tchaikovski.
Para la tercera edición, el festival apostó por el repertorio romántico ruso, que contó con música de 19 compositores que incluyeron a Piotr Ilich Tchaikovsky, Serguei Rachmaninov, Nicolai Rimsky-Korsakov y Modest Musorgsky con el objetivo de crear un repertorio nunca antes visto en América Latina.
El objetivo principal con esta edición, además de formar un público en el mundo de la música clásica, fue honrar la condición de «ciudad creativa de la música» que le otorgó la Unesco a Bogotá en 2012, lo que convirtió a la capital de Colombia en la primera ciudad latinoamericana en recibir el reconocimiento.
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En los 54 conciertos que se presentaron en diferentes sitios de Bogotá se rindió homenaje a compositores rusos. En los escenarios se presentaron ocho orquestas, tres coros, cuatro cuartetos, tres tríos, 19 solistas y más de 800 artistas.
Después del éxito de esta edición, el Teatro Mayor comienza a preparar la programación que ofrecerá en 2019, la cual estará dedicada a los compositores alemanes Johannes Brahms y Robert Schumann, y el austríaco Franz Schubert.
