Madrid, 30 oct (EFE).- El déficit del Estado central español hasta septiembre alcanzó el 4,39 % del PIB, un 22,8 % superior al registrado en el mismo periodo del año pasado.
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No obstante, la cifra de septiembre mejora en cuatro décimas el déficit alcanzado en el mes de agosto, cuando fue del 4,77 % del PIB.
España debe dejar este año su déficit público en el 6,3 por ciento del PIB en el conjunto de las administraciones, el 4,5 el Estado central.
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El déficit del Estado central hasta septiembre es resultado de unos ingresos de 74.992 millones de euros y unos gastos de 121.105 millones.
Si se descuentan gastos como adelantos a otras administraciones y devoluciones impositivas, el déficit público se sitúa en el 3,9 % del PIB.
Las cifras fueron publicadas hoy por el Gobierno español, que difundió también los datos de la Seguridad Social, que tuvo un superávit de 2.466,48 millones de euros hasta septiembre, lo que supone un descenso del 54,76 % con respecto al mismo periodo de 2011, según datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, adelantó la semana pasada que la Seguridad Social previsiblemente cerrará el ejercicio con déficit.
La Seguridad Social es la caja común de la que salen los fondos para el pago de las pensiones, el subsidio de desempleo y otras prestaciones sociales.
La secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández Currás, aseguró que está «en condiciones de garantizar una vez más» que el déficit del Estado «está bajo control» para cumplir con los objetivos pactados con Bruselas (4,5 % del PIB para el Estado).
«Estamos en la senda correcta, así lo muestran una vez más los datos», destacó para señalar que la «evolución positiva no puede traducirse en una relajación de la política fiscal, sino que lo importante es seguir con el esfuerzo de reducción de déficit en lo que resta de ejercicio».
El Banco de España, en su último boletín económico, no descartó que el déficit público supere el objetivo marcado para este año del 6,3 % del PIB, algo que de producirse podría obligar a adoptar medidas adicionales de austeridad.