Nueva York, 23 mar (EFE).- Wall Street cerró este viernes al alza pero no pudo evitar acumular su mayor descenso semanal de 2012 tras no conocerse datos macroeconómicos lo suficientemente alentadores en Estados Unidos como para apaciguar las preocupaciones sobre la economía china y la europea.
El principal indicador del parqué neoyorquino, el Dow Jones de Industriales, terminó hoy con un moderado ascenso del 0,27 %, con lo que sumó 34,59 puntos, para situarse en las 13.080,73 unidades, aunque en estos cinco días se ha depreciado el 1,15 %, su peor semana del año.
También el selectivo S&P 500, que subió este viernes el 0,31 %, ha anotado su retroceso semanal más pronunciado del año al bajar el 0,5 %.
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Por lo contrario, el índice compuesto del mercado Nasdaq se revalorizó un 0,41 % semanal tras ganar hoy el 0,15 %, con lo que encadena ya seis semanas consecutivas sin saber lo que son los números rojos.
El miedo a un «aterrizaje brusco» de la economía china se hizo evidente en el parqué neoyorquino esta semana, cuando unos nuevos datos peores de lo previsto sobre la actividad industrial del gigante asiático y la fuerte subida de los precios de la gasolina y el diesel en ese país propiciaron un decidido ánimo vendedor.
No ayudaron los decepcionantes datos que se conocían sobre la economía de la zona euro y las voces que hablaban de la necesidad de un rescate de España, por lo que los inversores neoyorquinos trataron de agarrarse a los datos coyunturales en Estados Unidos para evitar la recogida de beneficios.
Sin embargo, esta semana no encontraron como en otras ocasiones un refugio en los datos nacionales, ya que se han difundido varios datos sobre el mercado inmobiliario de la primera economía mundial que apuntan a que las recientes mejoras pueden haber sido fruto del cálido invierno en el país y no de una mejora estructural.
Precisamente uno de esos datos se conoció hoy, cuando el Departamento de Comercio estadounidense reveló que las ventas de casas nuevas cayeron en Estados Unidos el 1,6 % el mes pasado.
El parqué neoyorquino se salvó de encadenar hoy cuatro jornadas consecutivas en terreno negativo por el impulso del sector energético, que ganó el 0,9 % en una jornada en la que el petróleo de Texas subió el 1,44 %, hasta 106,87 dólares por barril, después de que Irán anunciase que sus exportaciones de crudo se redujeron este mes debido a las sanciones por su programa nuclear.
Desde el ámbito empresarial BATS Global Markets fue la protagonista de la jornada, después de que una serie de errores llevaran a la paralización de su cotización en su primer día negociándose en Wall Street e incluso decidiera finalmente cancelar su oferta pública de venta de acciones.
Los fallos cometidos por esa empresa provocaron que la cotización de las acciones de Apple tuviera que ser paralizada temporalmente por el mercado Nasdaq tras caer más del 10 %, aunque más tarde todo volvió a la normalidad y cerraron finalmente con un retroceso del 0,55 %.
También se habló mucho en el parqué neoyorquino de la peculiar propuesta que ha puesto sobre la mes Bank of America para tratar de solventar los problemas derivados de los préstamos basura, heredados en gran medida con su polémica compra de la hipotecaria Countrywide Financial en 2008, tras el colapso de Lehman Brothers.
El segundo mayor banco de Estados Unidos y uno de los mayores prestamistas hipotecarios del país ha lanzado un programa piloto para que alrededor de un millar de sus clientes que hayan incumplido con el pago de sus hipotecas puedan convertirse en inquilinos de sus propias viviendas para evitar el desahucio.
La semana próxima el calendario económico viene cargado: se conocerán datos del PIB, la confianza de los consumidores que elabora The Conference Board y los de la Universidad de Michigan, las cifras de ventas de viviendas de Standard & Poor’s, y los resultados de Best Buy y Research In Motion.
Nueva York, 23 mar (EFE).- La firma BATS Global Markets retiró hoy la Oferta Pública de Venta de acciones (OPV) con la que se estrenaba en el mercado Nasdaq, tras una jornada caótica en la que realizó una orden de compra errónea que provocó un fallo técnico que llevó a paralizar por unos minutos la cotización de Apple.
«En vista de los problemas técnicos de hoy, que afectaron la cotización de diferentes acciones, incluidas las de BATS, creemos que retirar la OPV es la decisión apropiada para la firma y para nuestros accionistas», afirmó su consejero delegado, Joe Ratterman, en un comunicado de prensa antes del cierre de los mercados.
BATS Global Markets, firma que opera dos mercados alternativos en EEUU, había fijado el precio de su salida a bolsa en 16 dólares, pero una hora después de empezar a cotizar este viernes en el Nasdaq sus títulos se desplomaron hasta 1 centavo, tras una confusa orden de compra de 100 acciones de Apple por un precio erróneo, inferior a su valor real de cotización en ese momento.
La empresa se vio obligada entonces a anunciar en su página web que estaba «investigando activamente un problema», el mismo día en que se estrenaba en Wall Street, tras recaudar 100,8 millones de dólares con su oferta pública de venta de acciones, que finalmente terminó retirando.
Ese error llevó a que, antes del medio día, la cotización del gigante tecnológico Apple tuviera que paralizarse temporalmente después de que sus títulos cayeran más del 10 %, por debajo de 541 dólares, aunque minutos después volvió a recuperarse y al final terminó con un leve retroceso del 0,55 % en 596 dólares.
Pese al susto de hoy la firma de Cupertino sigue siendo la empresa más valiosa del mundo con una capitalización bursátil que supera los 557.000 millones de dólares, muy por encima de la segunda más valiosa, la petrolera Exxon Mobil, cuyo valor se sitúa en 404.000 millones.
El confuso estreno de BATS en el Nasdaq se produjo el mismo día en que se conoció que la Comisión del Mercado de Valores (SEC) está investigando a firmas de corretaje de «alta frecuencia» porque podrían estar limitando la competencia o manipulando los mercados, entre las que, según The Wall Street Journal, se encontraría BATS.
La primera vez que se tuvo conocimiento de esa investigación fue en febrero cuando BATS presentó unos documentos ante el organismo regulador en los que decía que la SEC le había pedido «información relacionada con sus comunicaciones con determinados actores del mercado con algunos accionistas y directivos».
