El pasado domingo la juez quinta de control de garantías de Bogotá declaró ilegales las recapturas de Carolina Galván y Nilson Díaz, pues consideró que los acusados no contaron con el tiempo para preparar una defensa y entrevistarse con su abogada antes de la audiencia.
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Estas recapturas se llevaron a cabo el sábado en la noche después de que el viernes tras cuatro meses y medio en prisión, por la desaparición de Sara Sofía Galván, quedarán en libertad por nulidad en el proceso.
Su abogada, Aydeé Acevedo, pidió la anulación por posibles errores que la Fiscalía habría cometido durante la audiencia de formulación de cargos del pasado 23 de mayo cuando fueron procesados por el delito de desaparición forzada.
Así, los acusados quedaron de nuevo en libertad, por un caso que aún no se resuelve y en el que sigue siendo desconocido el paradero de la menor de dos años.
Después de manejar muchas hipótesis y versiones en las que incluso se investigó la posible aparición de la pequeña en Bucaramanga, la Fiscalía sostiene la hipótesis de que la niña falleció y su cuerpo fue puesto a la orilla del caño del río Tunjuelito.
Por esto, la entidad ha declarado que la imputación del delito de desaparición se realiza ante la falta de un cuerpo que demuestre la hipótesis señalada.
En una entrevista reciente Carolina Galván, madre de Sara Sofía, declaró que Nilson Díaz la estaba intimidando para cambiar las versiones e incluso inculparse a ella misma por los sucesos que tuvieron lugar el pasado mes de enero.
A la fecha, el caso continúa en proceso, la Fiscalía ha dicho que no comparte el argumento de la juez de garantías y que insistirá en imputar a Carolina Galván y Nilson Díaz, principales sospechosos de la desaparición de la menor.
