Colombia igualó 1-1 en su visita al estadio Hernando Siles de La Paz, en donde se midió ante Bolivia por las eliminatorias rumbo a Catar 2022.
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Jugar en los 3.640 metros sobre el nivel del mar de La Paz nunca ha sido fácil y de entrada, más que Bolivia, fue la altura el principal rival de Colombia.
Reinaldo Rueda dispuso de una formación inicial, entre la convicción y la obligación, conformada por David Ospina; Daniel Muñoz, Dávinson Sánchez, Óscar Murillo, William Tesillo; Wilmar Barrios, Matheus Uribe, Juan Guillermo Cuadrado, Juan Fernando Quintero, Luis Díaz y Roger Martínez.
Las principales novedades pasaron por Murillo, en lugar del lesionado Yerry Mina, el regreso de Quintero y un Roger Martínez, por su adaptación a la altura, al jugar en México.
Nos costó, pero no se sufrió
En los primeros movimientos del juego lo que más quedó en evidencia fue la inexactitud en la medición de los tiempos. Es conocido que en el estadio Hernando Siles el balón se hace más liviano y rebota con mayor facilidad a lo acostumbrado en escenarios sobre el nivel del mar.
Colombia llegó apenas horas previas al juego, para buscar contrarrestar los efectos físicos de la altura, pero sacrificó el no poder realizar entrenamientos con esas condiciones y esto se notó.
Cada control de pelota era complejo de dominar, la precisión de los pases no era la justa e incluso Dávinson Sánchez se iba complicando con un pase atrás que se le fue muy fuerte y por poco termina anotando en propia puerta. El más fino en sus movimientos y controles fue Roger Martínez: acierto total de Rueda.
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Con el transcurrir de los minutos fue precisamente el propio Martínez el que se fue encontrando con Luis Díaz y se empezaron a generar llegadas. Luego fue Quintero el que con sus precisos lanzamientos largos a las bandas logró poner a la Tricolor en un escenario más ofensivo.
Bolivia, pese a su adaptación, no logró generar mayor peligro en la primera mitad y la media distancia fue una de las herramientas que utilizó, sin lograr capitalizar.
Oxigenar para el complemento
Como novedad, casi cantada, para la segunda mitad fue al terreno de juego Andrés Andrade, en lugar de un agotado Juan Fernando Quintero, al que seguramente se reservó también para lo que viene. César Farias, por su parte, realizó dos movimientos al entretiempo, encontrando mayor desequilibrio en ataque.
Lo que no cambió fue el protagonismo de Roger, que se hacía socio de todos arriba y en una de esas dejó de mano a mano a Andrade que se lo perdió ante el portero Lampe.
El que más brilló, Roger Martínez, fue el que gritó el primer festejo. A los 69 minutos, el hombre de América de México fue a buscar un balón por la banda derecha y con velocidad se filtró entre tres defensores para definir, sin mucho ángulo, ante el portero rival.
Colombia enfatizó en sostener a ventaja, pero en una de esas de tanto insistir con la media distancia, por esa vía, Bolivia encontró la igualdad. A los 83 minutos Fernando Saucedo sacó un potente y preciso remate que dejó sin posibilidades a Ospina.
Sobre el final (97′) Bolivia se quedó con un hombre menos por la expulsión de Carmelo Algarañaz, aunque ya no había tiempo para algo más.
Igualdad a un tanto en un escenario que siempre complica a los visitantes. Con esto, Colombia llegó a nueve puntos en la tabla de posiciones y queda con la obligación de resultados favorables en los siguientes encuentros.
