El caso por la reventa de boletas en la campaña de la Selección Colombia con destino a Rusia 2018 sigue su curso. Hace año y medio que terminó el Mundial y más de dos que finalizaron las eliminatorias sudamericanas, pero el caso aún no queda resuelto.
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Cada vez más aparecen pruebas más contundentes en contra de los directivos de la Federación Colombiana de Fútbol de entonces y algunos que siguen en el ente. Ahora, la Fiscalía mostró pruebas en las que acusa a Luis Bedoya (expresidente de la Federación), Ramón Jesurún (actual presidente de la Federación), y Álvaro González Alzate, miembro del comité ejecutivo.
En las nuevas pruebas, tras llevar audiencia pública ante representantes de las empresas relacionadas en el supuesto desfalco, Ticket Shop y Ticket Ya, se aseguró que los directivos recibieron más de tres mil millones de pesos para garantizar el contrato de licitación, que acercó el exdirectivo del Real Cartagena, Rodrigo Rendón.
Fiscalía presenta pruebas de fraude
De hecho, la Fiscalía asegura que pudiendo otorgarle el contrato a otras empresas que también se presentaron, se decidió optar por una empresa con irregularidades en su adjudicación.
«Pese a todas las irregularidades se adjudica el contrato», aseguró el fiscal que lleva el caso. Según él, los 3.300 millones ofrecidos a los directivos garantizó la obtención del mismo y por poco hay renovación del mismo, en 2017.
En las pruebas presentadas también se asegura que el dinero usado para las coimas se transportó en una camioneta blindada.
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