Santa Fe no ha hecho una mala Copa Libertadores, tampoco buena. Los empates en el estadio Monumental de River y en el Maracaná, donde hace de local Flamengo, se valoran. No así los dos puntos que dejó escapar el por entonces conjunto de Gregorio Pérez, cuando recibió a Emelec en El Campín.
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Ya no había más excusas. Si el ‘León’ quería meterse en octavos de final, tenía imperiosamente que ganarle al ‘Mengao’ en Bogotá. Su gente, en cantidad mayor de lo que suele asistir al Nemesio Camacho, le dio un espaldarazo para conseguir el ansiado triunfo.
Los jugadores cardenales mostraron el compromiso desde el minuto cero. No le respetaron el escudo a Flamengo y salieron a agredirlo. Wilson Morelo, Anderson Plata y John Pajoy inquietaban a una defensa brasileña que mostraba limitaciones.
Llegó el momento de la polémica. En la presión asfixiante de Santa Fe, una mano en el área de Flamengo se protestó de principio a fin. La repetición mandó ‘preso’ a Henrique Dourado, quien puso el brazo izquierdo al remate de Carlos Arboleda. El árbitro uruguayo Daniel Fedorczuk no consideró penalti e hizo caso omiso a las justas protestas santafereñas.
¡JUGADA POLÉMICA🤔! Esta fue una de las jugadas más discutidas del primer tiempo entre Santa Fe y Flamengo. ¿Es mano 🤚 penal?pic.twitter.com/YKU2vhAJ8P
— Toque Sports (@ToqueSports) April 26, 2018
Flamengo, solo el pasaporte. El equipo carioca no estuvo a la altura de lo que es una Copa Libertadores, jugando por momentos arrinconado contra su arco. El primer tiempo terminó con empate a cero.
En la segunda mitad, la tónica se mantuvo. Los capitalinos fueron dueños del trámite, pero las ocasiones no fueron claras. Cuando podía penetrar, Diego Alves se transformaba en el héroe que necesitaba el ‘Mengao’ para llevarse el punto del Campín.
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Flamengo jamás quiso ganarlo, pero pudo haberlo hecho. En la última pelota del juego, una presión sobre Daniel Roa surtió efecto y Geuvanio encaró como los brasileños de antaño, rematando fuerte y consiguiendo el triunfo, pero Fedorczuk otra vez metió su mano.
Tal vez por culpa, el uruguayo no dejó que los brasileños gritaran gol. Cuando el delantero se iba de cara al gol, Fedorczuk pitó su silbato. Flamengo protestó tanto como una hora antes reclamó el conjunto local. Lo que era 1-1 culminó sin goles, cortesía del juez charrúa.
Nuevo empate para Santa Fe y las posibilidades se acortan. Aunque Flamengo fue una lágrima, los santafereños siguen sin conocer la victoria en la fase de grupos de la Copa Libertadores. Si River Plate gana esta noche ante Emelec, las opciones cardenales serán remotas.
La próxima semana se miden Santa Fe y River en El Campín. El destino le da una oportunidad más a los cardenales, pero será la última y ante un gigante del continente. Flamengo fue de paseó a Bogotá, pero se lleva mucho premio en el grupo más parejo de la presente Libertadores.