Qué difícil ha sido realizar este Mundial. En Rusia nada ha sido sencillo y a pocos meses de que ruede el balón en Moscú, un escándalo está a punto de explotar en las mismísimas narices de la FIFA.
PUBLICIDAD
El máximo ente del fútbol mundial quiere limpiar su imagen a toda costa y no solo en el andrajoso tema de la corrupción. El doping golpea a la puerta y en el país donde un escándalo de encubrimiento sistemático de sus deportistas derivó en múltiples sanciones, incluso con la expulsión de los Juegos Olímpicos de Invierno.
Ahora, es el fútbol el que está entre ojos de las investigaciones de dopaje y algunas federaciones y entidades de orden deportivo acusan a la FIFA de encubrir a la nación organizadora del próximo mundial, en este verano europeo.
El presidente de la Federación de Fútbol de Noruega, Yngve Hallèn, disparó munición gruesa contra el seleccionado anfitrión, al pedir su descalificación de la Copa del Mundo que realizará, por haber encubierto el dopaje de 34 futbolistas de la Liga Premier de aquel país. La gran mayoría pertenecientes a la selección nacional.
Los nórdicos afirman que la FIFA es conocedora de este caso y no lo revelará hasta que acabe el campeonato mundial, con el ánimo de no entorpecer el espectáculo que comenzará el 14 de junio, en el estadio Luzhniki. No obstante, los noruegos ejercen presión y aseguran que los países escandinavos apoyan la moción.
Ante las palabras, desde Moscú salieron al cruce de estas declaraciones y negaron las afirmaciones. El presidente interino de la Unión de Fútbol de Rusia, Alexander Alaev, dijo que los noruegos solo buscan desacreditar.
“Consideramos que las declaraciones son absolutamente inválidas. Es claro que el objetivo es desacreditar al fútbol ruso en vísperas de Copa del Mundo”.
PUBLICIDAD
Alaev dijo que pondrán una queja formal ante el comité de ética de la FIFA, para que se multe a Noruega por difamación. Desde Zúrich no le han contestado.
Sin embargo, las acusaciones contra la FIFA no provienen solo desde Escandinavia. La Agencia Antidopaje de la FIFA, una de las encargadas de destapar el escándalo de dopaje y la incompetencia de los laboratorios moscovitas, calificó a la FIFA de “exasperante”.
Asimismo, el presidente de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA), prefiere creen en la buena voluntad de la FIFA aunque cree que existe una demora en el margen de actuación.
“Les proporcionamos toda la información que tuvimos en ese momento y les dijimos que debían ser responsables de poner manos a la obra con el manejo de los resultados”, afirmó el presidente Craig Reedie.
Por su parte, desde el despacho de Gianni Infantino se comprometieron a ubicar a Grigory Rodchenkov, exdirector del laboratorio ruso donde se adulteraban las pruebas médicas de los deportistasy que se convirtió en informante en la causa.
Sin embargo, por causas de seguridad se ha mantenido en el anonimato y aunque lo han intentado contactar, en FIFA dicen que no han podido hacerlo para desenmascarar al fútbol ruso.
“La FIFA continuará con sus investigaciones, trabajando de cerca con la WADA y explorando cualquier camino posible”, señalan desde Moscú. La FIFA se compromete, pero el director de la Agencia Antidopaje de Estados Unidos descree de esta afirmación.
“Los atletas limpios y el público merecen que el impacto del dopaje ruso se resuelva de inmediato, por lo menos, en el fútbol. Llevamos más de tres años resolviendo este problema y no hay excusa para que en este momento la FIFA no logre contactar al principal testigo”.
Mientras la FIFA insiste en mostrar trasparencia, desde muchos flancos le piden claridad en su lucha contra el dopaje. El Mundial de Rusia avanza a paso firme y suena inverosímil una expulsión de la selección anfitriona, pero la realidad es que algo huele mal, así desde Zúrich se le quiera echar perfume.