La Superliga de China se ha metido en el mercado del fútbol mundial gracias a sus traspasos y salarios millonarios. Pero dos decisiones de la Asociación China de Fútbol (CFA) reducirían el impacto de las cifras que se pagan en el gigante asiático, y podrían cerrarle las puertas a jugadores colombianos como Adrián Ramos.
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Desde 2016, jugadores como Carlos Tévez, Ezequiel Lavezzi, y Oscar abandonaron sus equipos en Europa y América para recibir los salarios más altos del mundo futbolístico. Entre los colombianos, Jackson Martínez, Giovanni Moreno y Freddy Guarín han marchado a recibir cifras millonarias en China.
Tévez, por ejemplo, recibe 38 millones de euros anuales en el Shanghai Shenhua, y circuló una oferta por Cristiano Ronaldo en la que el portugués recibiría 120 millones de euros cada año. Jackson Martínez recibirá en este 2017 12,5 millones de euros por su actuación en el Guangzhou Evergrande.
La decisión consiste en limitar, a partir del 19 de junio, los traspasos de jugadores extranjeros a la Superliga de China a 6,6 millones de dólares. Así mismo, los contratos de jugadores chinos no podrán superar los 2,9 millones de dólares.
Esta decisión incluye el costo de los traspasos a clubes extranjeros con afiliaciones en China: dos casos puntuales son el Inter de Milán con el Jiangsu y el Granada con el Chongquing Lifan. Así, a un jugador como Adrián Ramos se le tendría que tener en cuenta el traspaso del Borussia Dortmund al Granada si es traspasado al Chongquing.
La nueva norma se une al impuesto del 100% a los fichajes extranjeros aprobado por la CFA el pasado 25 de mayo y efectivo también a partir de este mercado de verano. Con estas medidas, la federación espera frenar la llegada de jugadores por precios exorbitantes que ha distorsionado el mercado mundial del fútbol.