¡Tú intranquilo! Ospina fue humillado y preocupa a toda la Selección (1-5)

Qué Dios nos coja confesados. Si es por las últimas dos presentaciones de David Ospina en la Champions League, ante el Bayern alemán, toda Colombia y más que nada José Pékerman, debemos estar preocupados. El exportero de Atlético Nacional recibió diez goles en dos partidos, un promedio alarmante de cinco por partido.

En la mayoría de ellos, el colombiano no tuvo culpa. Sin embargo, sus respuestas tampoco fueron prenda de garantía para que Arsenal compitiera. En Múnich, el equipo inglés fue vapuleado de principio a fin 5-1 y su obligación en Emirates era ganar por 4-0. La ilusión se presentó cuando muy rápido Theo Walcott puso la ventaja de los ‘Gunner’, rematando de manera potente ante el inmóvil Neuer.

Eran momentos en los que Ospina no sufría y cada vez que aparecía, lo hacía con solvencia. Todo se volteó en la parte complementaria. Al igual que en la ida en terreno bávaro, los goles llegaron como aguacero. Primero, fue el polaco Robert Lewandowski, que desde los doce pasos fusiló a David Ospina.

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Luego, 15 minutos más tarde, fue el turno de Arjen Robben de aprovechar un mal despeje de Ospina, entrar al área y definir a merced. El arquero colombiano tuvo gran responsabilidad en la ventaja alemana.

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Tres minutos más tarde, fue el brasileño Douglas Costa quien regateó y de zurda puso el balón en el rincón donde Ospina nada pudo hacer. La pesadilla se hacía interminable y aún faltaba que Arturo Vidal asumiera el protagonismo.

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El chileno aprovechó los espacios de una defensa londinense totalmente entregada y arrodillada a la merced del Bayern. En el primer gol del austral, el ‘Rey’ se la picó ante la salida de un indócil Ospina. El segundo fue parecido, aunque en esta ocasión le hicieron el uno-dos, sacrificando al colombiano.

La eliminatoria sudamericana está a la vuelta de la esquina. Colombia se jugará el pellejo en los partidos ante Bolivia y Ecuador. En ofensiva, nuestros delanteros la están metiendo en la liga del mundo. Pero atrás, nuestra prenda de garantía, que siempre fue Ospina, vive un momento terrible. Intranquilo.