Sanción juegos a puerta cerrada. pic.twitter.com/qVOfZLjh4i
— Millonarios FC (@MillosFCoficial) 27 de septiembre de 2016
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El tema de los partidos adelantados de Millonarios se ha convertido en una verdadera novela a la cual este martes se le ha agregado un capítulo (final?) debido a que la Dimayor ha aceptado el reclamo del club y decidió bajar de 4 a 3 fechas la sanción para jugar a puerta cerrada. Esto se suma a la decisión tomada por la Alcaldía de Bogotá que había impuesto otra castigo por 3 fechas sin hinchas en las tribunas y después decidió tumbar la misma.
Aquel juego válido por la Fecha 15 de Liga Águila, adelantado para el 10 de agosto por las reparaciones a la gramilla del Campín, tuvo que ser suspendido cuando faltaban pocos minutos para el final debido a la invasión de campo por hinchas de Millonarios. Ocurrido esto se había comunicado por la Dimayor que el club iba a tener que jugar sus próximos 4 encuentros como local a puerta cerrada. De esta pena impuesta por el ente del fútbol local ya se cumplieron 2 partidos; Fortaleza y Deportivo Cali.
Sin embargo, tal como había sucedido con la Alcaldía de la capital que le quitó la sanción, el club acudió a los recursos legales y pudo lograr que el castigo se redujera un poco para solo completar 3 encuentros sin asistentes y para el cuarto ya pudieran volver sus hinchas. Por medio de un comunicado el mismo club fue el encargado de comunicar esta novedad:
Esto quiere decir que para el partido de la jornada 18, en el cual los azules de Bogotá debían recibir a La Equidad, ya habrá entrada de la afición y es espera que para este partido el equipo dirigido por Diego Cocca llegue con opciones de clasificar y el apoyo de sus hinchas sea un aliciente para rematar bien la fase todos contra todos.
Lo que sí se mantiene, y no se habla de reconsiderarlo, es el castigo a 10 hinchas que fueron identificados e individualizados después de aquel comportamiento indebido cometido en las instalaciones del máximo escenario del fútbol capitalino, esto mismo que tuvo que ver con la salida de Rubén Israel de la dirección técnica del equipo, además de los pobres resultados deportivos y el mal juego.