Los jugadores de Barcelona y Real Madrid apenas tendrán tiempo para recuperarse de los partidos de Liga de Campeones, para empezar a pensar en el superclásico del fútbol español, que sin duda tiene connotaciones mundiales.
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Mediapro, empresa dueña de los derechos del partido, explicó que el sábado habrá una audiencia de 400 millones de espectadores, algo apenas comparable con una final de la Liga de Campeones e incluso con la final del Mundial de Fútbol.
Alrededor del mundo no hay un partido que despierte más interés entre dos clubes del mismo país, que el que disputan los azulgrana frente a los merengues.
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Los dos equipos llegan desanimados por sus respectivas derrotas en Europa, pero fortalecidos por el buen papel que vienen adelantando en la Liga de España.
La disputa por el liderato estará al ‘rojo vivo’ y una victoria de Barcelona los dejaría a un solo punto de quitarle el trono al Real Madrid, que lo ostenta desde hace varias fechas.
También en el campo habrá un duelo personal por el liderato de la tabla de goleadores. Cristiano Ronaldo y Lionel
Messi tienen en este momento el mismo número de goles y, su propósito, no es otro que terminar como máximos artilleros de una de las Ligas más complicadas del mundo.
Las expectativas son grandes en país ibérico y la venta de entradas para los aficionados han superado todos los récords en la historia de los clásicos. A disposición se pusieron 99 mil entradas a las gradas del Camp Nou, que se acabaron más rápido de lo esperado. Incluso los encargados han dicho que con las solicitudes hechas se podría llenar otro estadio.
Este partido es un fenómeno del fútbol que pocas veces se había podido observar en la historia. Los clubes más prestigiosos, más valiosos, más ricos y de mejor nivel estarán en la cancha con un solo objetivo: jugarse su honor ante la mirada atónita de millones de espectadores en el mundo.
Publimetro