“Si hay un hospital público donde uno toma la decisión de la noche a la mañana de despedir 500 trabajadores y el hospital sigue funcionando, la pregunta que tenemos que hacer como sociedad es ¿no habría allí excesos?».
millones es lo que costaba la nómina del HUV ante de los despidos, según dijo la gobernadora Dilian Francisca Toro.
Pese a los tensos días que se viven en el Hospital Universitario del Valle por cuenta del despido de 547 trabajadores, después de que la gobernadora Dilian Francisca Toro lograra que el HUV se acogiera a la Ley 550, la polémica decisión ha ganado apoyo desde varios sectores.
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El gobierno nacional, representantes de la bancada de congresistas vallecaucanos y uno de los sindicatos del principal hospital del Suroccidente colombiano, ratificaron su apoyo al proceso de reestructuración que emprendió Toro.
El ministro de Salud, Alejandro Gaviria, respaldó a la Gobernadora del Valle en su decisión de acudir a la Ley 550 como alternativa de salvación del Hospital, y ratificó que la medida era inevitable.
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Gaviria, quien ha acompañado desde un comienzo el proceso emprendido por la Gobernación del Valle hasta llegar a la aplicación de la medida, señaló a través de una entrevista a la cadena Caracol, que “lo que se hizo era lo que tenía que hacerse, la Ley 550 era inevitable y la reducción de algunos gastos de este hospital público, el más grande de nuestro país, yo creo que también era inevitable”.
Aseguró el ministro Gaviria que el centro asistencial gastaba más de lo que tenía y era necesario reducir los costos, lo mismo que la planta de trabajadores, un hecho que ha generado reacciones.
“Lo que había en el HUV era un exceso de gastos asociado a una nómina que era impagable y estaba poniendo en riesgo la viabilidad del hospital. Ahora esto tiene que hacerse protegiendo la prestación del servicio. Estamos acompañando a la Gobernación en este proceso”, dijo el alto funcionario.
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Sobre las inquietudes que ha generado la supresión de cargos en el centro asistencial, el Ministro indicó que “si hay un hospital público donde uno toma la decisión de la noche a la mañana de despedir 500 trabajadores y el hospital sigue funcionando, la pregunta que tenemos que hacer como sociedad es ¿no habría allí excesos?, ¿no estamos convirtiendo a los hospitales públicos en agencias de empleo?”.
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Alba Luz Campaz, presidenta del Sindicato de Servidores Públicos del Hospital Universitario del Valle, que representa la mitad de los empleados del HUV, aceptó que la Ley 550 era la salida más viable para salvar el centro asistencial.
“Más allá de que estemos de acuerdo o no con la Ley 550, nosotros consideramos que hoy es una opción para que el hospital continúe siendo alternativa de vida para la población más vulnerable del Suroccidente del país”, manifestó la líder sindical.
Campaz aseguró que, pese a que “el hospital sigue prestando los servicios, considero que hay que hacer ajustes, que hay servicios en los cuales el personal quedó muy menguado”.
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La bancada de congresistas también apoyó la decisión de la Gobernadora. El representante a la Cámara José Luis Pérez, aceptó que es una medida drástica, pero indicó que es mejor la intervención versus la liquidación. “Preferimos una intervención con fines de salvamento”, dijo.
El representante Jorge Eliécer Tamayo señaló, a su turno, que se trata de una medida que afecta a u sector de la población, pero que había que hacerla porque no solo basta con estar incluido en la Ley 500 sino garantizar la viabilidad del hospital.
Para el representante Heriberto Sanabria “ahora viene lo más importante y es trabajar en el plan de desempeño, de reubicación laboral de quien así tenga derecho, de un plan de austeridad total, pero lo más importante que se garantice el servicio de salud”.