La cultura del ‘ojo por ojo, diente por diente’ está creciendo en la capital del país.
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Una reciente investigación de la Universidad Libre señala que el 64% de los bogotanos justifican la violencia por cuenta propia.
Conforme con las cifras reveladas por el estudio, en los últimos tres años aproximadamente 300 personas murieron a causa de linchamientos en la capital.
Según las conclusiones de la investigación, la inoperancia del sistema, sumado a su congestión y desconfianza, ha generado que, hoy por hoy, muchos ciudadanos se tomen la justicia por propia cuenta o en su defecto justifiquen estos actos, asumiendo las consecuencias que trae consigo ese delito.
“Datos del Centro de Estudios y Análisis en Convivencia y Seguridad Ciudadana, que fueron analizados en el trabajo académico, revelaron que entre junio y diciembre de 2017 los bogotanos ayudaron a capturar a cerca de 8100 delincuentes, más o menos 45 ladrones al día. El 80% eran menores de edad, lo que dificultó su judicialización y en menos de 48 horas quedaron libres; o no se abrieron procesos ya que nadie presentó denuncia. En otros casos, la cuantía del delito fue tan baja que no dio lugar a la penalización”, dijo Laura Guevara, abogada de la Universidad Libre y autora de la investigación.
Igualmente, el análisis revela la incredulidad de los bogotanos ha llegado a tal punto que el 69% prefiere no denunciar por la desconfianza que le sienten a los jueces.
“Solo 24 de cada 100 delitos se comunican a las autoridades”, agregó Guevara, tras resaltar que “el 70% considera que la justicia es muy lenta”.
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Una historia para no repetir
Esta situación genera gran preocupación en las autoridades, ya que el viernes pasado se presentó un hecho de violencia, en el que un hombre de ciudadanía venezolana perdió la vida a manos de la comunidad.
El caso ocurrió en el barrio Acapulco, de la localidad de Ciudad Bolívar, en medio de una asonada que se desencadenó contra sietes personas, señaladas por la multitud como los responsables del rapto de menores.
Conforme con las investigaciones preliminares, los ciudadanos protagonizaron el linchamiento luego de caer en una de las falsas cadenas que están circulando con mensajes alusivos al secuestro de niños en la capital.
Por tanto, las autoridades reiteran el llamado a los ciudadanos para que no caigan en el juego de las cadenas falsas, difundidas por redes sociales y aplicaciones como WhatsApp.
“Esto es lo que nos trae el mal uso de las redes sociales: cualquier persona puede utilizar para difamar o para crear caos o zozobra. El llamado es a hacer la denuncia y esperar la verificación correspondiente por medio de los canales institucionales”, afirmó el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, General Hoover Penilla, tras señalar que por este hecho hay ocho personas identificadas e incluso una indiciada.
Por su parte, el Secretario de Seguridad, Convivencia y Justicia, Jairo García, rechazó estos brotes de violencia, asegurando que la comunidad no debe tomarse la justicia por mano propia: “le pedimos a la ciudadanía tranquilidad. La Policía y el Distrito estamos haciendo todo el esfuerzo para esclarecer cualquier información que este circulando. Evidentemente hay personas interesadas en generar pánico e intranquilidad”.
En este caso en particular, no se descarta la intención criminal de mostrar a venezolanos como raptores de niños, por lo que el tema deja sobre la mesa una inmensa reflexión sobre el perverso juego de la desinformación, xenofobia y justicia por mano propia, en que los ciudadanos se están dejando caer.
